5 de mayo de 2015

Mediodía de martes con sol

Me da una íntima satisfacción que haya gente que lea lo que escribo, más allá de la opinión que tengan de mi persona. Estoy convencido de que en Lobos, se pueden hacer las cosas mejor. Es verdad que ha habido un progreso notable durante la actual gestión, sobre todo en asfalto y viviendas. Pero ahora, que en el Concejo Deliberante el oficialismo perdió la mayoría propia, se verán obligados a consensuar. Pero siempre aparece alguien dispuesto a "ayudar": un concejal del Frente Renovador apoyó el aumento del Presupuesto presentado por el Ejecutivo, y ello permitió de la "Ley de Leyes" saliera aprobada tal como lo pretendía Sobrero. Como es natural, dicha actitud del edil díscolo provocó gran indignación en el arco opositor, y no sería descabellado pensar que el ex-massista haga una "borocoteada" y se pase a las filas del FPV.

En política todo se transa, todo se negocia, es "un toma y daca" permanente, por ejemplo: yo te apruebo tal proyecto si vos me votás el mío, o cosas así. Quizás en Lobos no se ve tanto, pero en el Congreso las cosas se negocian así, hay mucha guita por debajo de la mesa con tal de conseguir el voto salvador que permita aprobar una Ley. Pero esto no es nuevo: lo han hecho todos los gobiernos. Aquellos legisladores que tienen un poco de dignidad rechazan estas prácticas espurias, pero otros, con tal de llevarse unos buenos billetes,  transan enseguida. Por esto yo estoy convencido, aunque para la Justicia no haya sido así, que De la Rúa o su Ministro de Trabajo intentó sobornar a coimear a los Senadores del PJ. Para aprobar la Ley de Flexibilización Laboral. Y el único que tuvo HUEVOS para denunciarlo fue Antonio Cafiero: sus compañeros de bancada, en lugar de dar la cara o cuanto menos admitir que algo raro estaba pasando, lo dejaron solo. Cafiero habrá sido un garca en muchos aspectos, pero tuvo la dignidad de no venderse por plata. Pero como en Argentina todo ex Presidente sospechado de corrupción es sobreseído, no me resultó extraño que eso sucediera en el caso de De la Rúa. Me pregunto qué diría Don Lisando de La Torre, quien en el Senado de la Nación arriesgó su vida por oponerse al Pacto Roca-Runciman. Punto final.

¿Quiénes son los próceres del siglo XXI?

  La mañana se presentó tranquila, sin mayores sobresaltos. Me levanté temprano para hacer las cobranzas de los avisos publicitarios y estim...