26 de julio de 2024

Un recinto que hace rato dejó de ser “honorable”

 

Nuevamente, nuestros concejales han protagonizado un lamentable espectáculo al enfrentarse con duros epítetos y con amenazas de agresión física. No han sido todos, afortunadamente, pero las chicanas y los pases de factura están a la orden del día. No se ocupan por legislar como debería ser, sino por defender posiciones personales. En algunas ciudades vecinas, como Navarro, las sesiones son televisadas, y en esos casos los ediles que cuidan un poco más porque saben que están expuestos. Pero acá se sesiona entre gallos y medianoche ante la indiferencia del común de la gente, que tiene demasiados asuntos en qué pensar antes que presenciar una discusión estéril entre dos concejales de distintas bancadas. Lo que es evidente, es que no fueron elegidos por el voto para dar vergüenza.

Llegó el momento de ponerle freno a esto, porque de lo contrario se va a empezar a tomar como una conducta natural de nuestros representantes. Para más de uno, cobrar una dieta todos los meses y estar 4 años significa un buen negocio, no una vocación cívica. Sería bueno saber cuántos estarían dispuestos a ser concejales ad-honorem, sin percibir ningún beneficio económico. Todo me hace pensar que no habría muchos voluntarios. Hay un reglamento que cumplir, aquel legislador que llega tarde o se ausenta sin aviso debe ser sancionado, y lo mismo criterio debe adoptarse para el que asume una actitud agresiva hacia un par. El oficialismo siempre suele ser funcional al Ejecutivo para aprobar los proyectos de ordenanza que éste eleva para su tratamiento. La oposición no siempre asume ese rol. O se oponen a todo porque sí, o hacen la vista gorda cuando deberían auditar y controlar los recursos públicos.

Cuando se vota el presupuesto, generalmente suele ser aprobado por mayoría. Lo que pasa es que el oficialismo puede ostentar una mayoría circunstancial, pero la composición de los bloques va cambiando cada nueva elección como un tablero de ajedrez. Así como en su momento hubo bancas para el Frente Renovador por el efecto arrastre de la boleta, ahora también hay un legislador de LLA. Lo más probable es que permanezca cuatro años sin pena ni gloria y luego pase prontamente al olvido. A nadie le importará lo que hizo ni lo que hará. El tiempo es un efecto fugaz, decía Fito Páez. Y tenía razón. Porque en ese afán de protagonismo, algunos son capaces de utilizar un estrado como tribuna de fútbol, una actitud inaceptable y que merece el repudio de toda la sociedad que puso a esos ediles en el sitial que ostentan actualmente. Puede haber opiniones diversas, pero siempre en un marco de respeto. Si después de la sesión quieren seguir discutiendo en la calle, son libres de hacerlo. Llegamos entonces a las siguientes conclusiones: 1) Fueron elegidos por el voto, 2) Les pagan un sueldo, 3) No hay ninguna sanción para el que llega tarde o no se presenta a sesionar. Con esos tres puntos estoy diciendo suficiente. Quienes ser comportan como guapos de barrio no contribuyen a jerarquizar la función pública, sino que la denigran. El resto queda a consideración de los lectores. Nos estamos viendo pronto. Punto final.

24 de julio de 2024

Trata de personas

 

El tema de la desaparición de este niño, Loan, se sigue por televisión como si se tratara de un folletín por entregas. Hay testigos que se desdicen cuando los empiezan a indagar o los someten a un careo, pistas falsas, funcionarios que han tenido que renunciar para no quedar "pegados" en la investigación.

Yo no digo que lo sucedido no sea grave, pero es desgastante llegar a la conclusión de que hace más de un mes que se está dando vueltas sobre lo mismo, con una improvisación total, sin ningún indicio firme. Sería bueno que por unos días las pantallas le dieran descanso a la cobertura que hacen los movileros para ver qué onda, me refiero a si al cabo de unas jornadas surge alguna novedad sustancial o si todo sigue igual que el primer día. Yo lo que veo es que se le está otorgando un espacio desmesurado diariamente, teniendo en cuenta que hay un montón de chicos que son víctimas de una red de trata. Esto ya lo dije una vez, pero no está de más recordarlo, y pensar qué es lo que suscitó tanto interés en este caso puntual desde el vamos. 

Hasta ayer lo que sabíamos es que la búsqueda se había trasladado a Chubut y Santa Cruz, y si se decidió continuar con la pesquisa por esa zona, tan lejana a Corrientes, fue simplemente porque alguien escuchó que un niño exclamaba ser Loan. Tiene 5 años, y una criatura de esa edad difícilmente pueda expresarse de esa forma, sobre todo si ha sido raptado por adultos que imponen sus propias reglas.

Por todo lo que mencioné, es obvio que la investigación no va dirigida hacia ningún avance en la causa. El expediente ya debe acumular innumerables fojas, y la conmoción que provoca este hecho se contrapone con la intrascendencia que se le da a otros casos que involucran a menores de edad. Quizás, es lógico pensar que se ha ido construyendo en base a la desaparición una historia que tiene los condimentos que la televisión requiere, y por ello se le brinda cobertura en detrimento de aquellos casos que no logran tener trascendencia en los medios nacionales. Así es cómo ocasionalmente vemos la foto de algún nene cuyo paradero es una incógnita, pero no se avanza más que hasta ahí.

Ojalá, cuando las cámaras ya se hayan retirado y los móviles emprendan el regreso a Buenos Aires, podamos seguir reflexionando sobre qué es lo que hace que un crimen vinculado con la trata de personas haya recibido tanta atención pública. No es casualidad, desde luego, y siempre cabe la sospecha de que se convierta en una cortina de humo para ocultar otras cuestiones que no conviene que se sepan. Nos estamos viendo pronto. Punto final.

23 de julio de 2024

Siempre vuelvo a renacer

 

Martes por la noche en la ciudad. Como cualquiera de ustedes, estoy comprometido con hacer mi trabajo del modo más profesional posible. Tiene que ver con mi formación y con haber elegido voluntariamente una carrera para poder dedicarme a ella a futuro. Pero a veces hay circunstancias personales que hacen que uno no pueda rendir al 100 %. Atravesé un período de bajón bastante jodido, por suerte me logré recuperar, y ahora estoy de nuevo al ruedo. Si ustedes han leído mis notas anteriores, verán que yo nunca dejo de agradecer el hecho de contar con una familia que me banca y me apoya en todo. Ellos están en los malos momentos y también en las alegrías. Y eso no quiere decir que sean obsecuentes o que no me marquen mis falencias, todo lo contrario: El hecho de tratarse de seres queridos les otorga esas facultades, a la que no daría lugar si un desconocido me las planteara.


Me tuve que recuperar, sí, de un período de depresión, y creo que no soy el único. Ni siquiera me importa que algunos no quieran reconocer que han pasado por ese tipo de situaciones. Somos humanos. Y yo soy totalmente honesto al poner en el tapete lo que pretendo expresar. 


Hoy grabé un nuevo programa para la tele y estoy conforme con el resultado. Me sentí cómodo, y el invitado también. Cuando las cosas fluyen, te das cuenta enseguida, de igual manera que sos vos mismo el que te comés la cabeza cuando estás encerrado en tu propio laberinto. La gente que no sabe lo que uno ha tenido que pasar podrá juzgarte con liviandad, al final de cuentas no tienen por qué saber de todo, y hay cuestiones que uno prefiere mantener en reserva. 


Cuando no le encontrás la vuelta, aparece la frustración, la culpa, un cúmulo de sentimientos negativos. La ominosa sensación de fracaso, de tiempo perdido, de que toda tu vida ha sido un gran fracaso, que no has alcanzado nada relevante. Hasta que comprendés que le estás faltando el respeto a tu propia vida pensando así. El impulso vital es lo único que nos sostiene, y cuando las noches se hacen largas y aburridas, comenzás a maquinarte, porque el cerebro es un maldito órgano que no descansa, entonces hacés conjeturas absurdas, que se convierten en pensamientos repetitivos que machacan donde más duele. Pero eso es todo lo que diré. Hoy, puedo decir que estoy bien, de lo contrario no estaría escribiendo este posteo. Sólo puedo escribir por placer cuando estoy tranquilo. Por eso, una pregunta recurrente ha sido siempre si es cierto que el arte nace del dolor. No lo sé, pero a mí no me sale, cuando me siento mal lo último que pienso es en sentarme a escribir. Trabajo a reglamento porque sé que tengo que hacerlo, pero no es una experiencia grata.


Cuando dejás de reprocharte cosas o de sentir pena por vos mismo, comienzan a activarse otros circuitos en tu mente. La comida vuelve a tener sabor. Hasta un cigarrillo se disfruta mucho más. Una ducha caliente, un café con un amigo, todo se transforma. Claro que para alcanzar esa revalorización, fue necesario haberlo pasado mal. No queda otra, los hechos se van dando así.


Para no hacerlo más extenso, quiero decirles que si me molesto en escribir sobre lo que me pasa, es porque quizás esté siendo un poco egoísta, creyendo que lo mío le interesa a alguien más. Las vivencias son intransferibles, y cada uno decodifica la realidad con un lente distinto. A veces estoy harto de quién soy, ni yo me aguanto, y me empiezo a fastidiar pero no tengo a nadie a quién culpar. Todo pasa por mí, yo me hice el rulo y en consecuencia tengo que hacerme cargo.

Queda mucho camino por recorrer, pero estoy dispuesto a transitarlo de la mejor manera, de eso estoy seguro. Al final del día, descubrís que una mala racha es lo único que te permite valorar los buenos tiempos. Nos estamos viendo pronto. Punto final.

22 de julio de 2024

Al borde del precipicio

 Nunca perdería mi tiempo discutiendo con un libertario tuitero. Parece que ahora los funcionarios son despedidos por esa red social, y hay un grupúsculo de influencers que se dedican a marcar la cancha. Realmente lamentable. Nunca pensé que esta gente tuviera una mirada tan estrecha para las relaciones públicas. Lo que  pasó con Garro demuestra cómo el circulo rojo opera desde Twitter para medir la fidelidad al líder en la eterna disputa de halcones y palomas. Hay que decir algo que salta a la vista: Por lo menos, CFK podía hilvanar un discurso coherente sin tener que leerlo. Milei es incapaz de ejercer esa habilidad, y como él y sus acólitos dicen lo primero que les viene a la boca, tenemos muchos conflictos y frentes abiertos con países vecinos. 

La inexperiencia, sumada a la falta de tacto y de mesura, da lugar a que el propio Presidente o su hermana tengan que salir a desautorizar a la Vice, porque escribió un tuit ofensivo y se niega a borrarlo. Muy berreta todo. ¿Esa es la estrategia comunicacional del Gobierno? ¿Cómo pueden ser tan caraduras de decir que el peso se convertirá en una moneda fuerte, con el dólar blue trepando en una escalada que no tiene techo?

Ayer escuché a un analista político que planteaba el grado de dependencia que existe hacia el FMI. Esperan que gane Trump en EE.UU., y que ejerza presión para que libere un desembolso que el organismo se resiste a entregar. Claro que esa guita no la veremos nunca, del mismo modo que tampoco vimos los 50.000 millones de dólares que recibió Macri y que se licuaron enseguida. Ni sueñen con que se levante el cepo cambiario, no están dadas las condiciones para hacerlo, y desde el Palacio de Hacienda lo saben. Aquellos que votaron a este Gobierno con la promesa de una dolarización, están recibiendo una medicina que no es la que "compraron". Lamentablemente, habrá que devaluar otra vez para generar competitividad, pero es una decisión ingrata y que traería numerosas complicaciones. Por eso la están dilatando.

El Fondo está reclamando una devaluación, pero no ofrece nada a cambio de pagar el costo social que ello implica. Lo pone como un paso que hay que dar, pero no garantiza que sea la llave para otorgar un nuevo crédito. Así estamos. Mientras tanto, el panorama es de un gran desconcierto, que el mismo gobierno contribuyó a crear con sus medidas desacertadas. La Ley Bases ya está aprobada, desde la Rosada insistieron que era un principio de solución para un montón de cuestiones, pero en sí misma la Ley lo único que está haciendo es modificar la política fiscal, presionando sobre los monotributistas, aumentando el valor de la cuota mensual y fijando nuevos topes de facturación. Nadie vendrá a invertir un solo centavo si no hay reglas claras, y estamos en ese corset desde hace bastante tiempo. Ojalá que se revierta, porque ya llevan 8 meses de gestión, no sé si ellos se habrán dado cuenta de que el "plan motosierra" no es gratis, y el impacto en el bolsillo de los trabajadores se siente ante cada nuevo atropello. Nos estamos viendo pronto. Punto final. 

19 de julio de 2024

Vísperas del Día del Amigo

 

Están los de siempre.

Están los que se fueron sumando.

Están aquellos que fallecieron, o desaparecieron de la faz de la Tierra.

Están los conocidos, esos a los que uno saluda por la calle y que te retribuyen el gesto, o bien lo devuelven con una sonrisa.

Están, también, los que en principio no eran amigos, pero que por el trato cotidiano fueron adquiriendo esa calidad.

Están los de la infancia, una amistad casi incondicional, aunque nos veamos esporádicamente porque cada uno está en lo suyo.

Todos los que acabo de mencionar son mis amigos, y ni siquiera los cuento o me pongo a pensar cuántos son, ellos permanecen en algún lugar, en una mesa de café, en un bar cualquiera, dispuestos a compartir un cortado o una cerveza.

No me nace juzgarlos por ninguna conducta, ya bastante tengo con la mía, entonces lo que mejor me sale es ir al encuentro de ellos, sentirme vivo, y hablar de bueyes perdidos.

Sé que ellos obran de la misma manera. Es decir, hallarán conductas objetables de mi parte, pero no lo señalan con el dedo, quizás hacen algún comentario casual, pero sea como fuere tienen la sutileza necesaria como para hacerme sentir que es por mi bien.

Precisamente, están aquellos que jamás te juzgarán a menos que seas un criminal. Yo no sé cómo definirlos, se me ocurre decir que son incondicionales, no hace falta andar con rodeos, todo fluye naturalmente. Y eso es genial.

Todos quienes ocupan un lugar dentro de mi vida, son mis amigos, exceptuando la familia. Son otra familia, constituida de otra forma, pero están ocupando su sitio, que no es para cualquiera. Por lo tanto, sólo me resta agradecer a quienes han confiado en mí, a quienes me bancan, a quienes saben que yo hago lo mejor posible aunque no siempre dé su resultado. No puedo pecar de ingrato ante esas gentes. Son, como se dice ahora, todo lo que está bien. Y ojalá lo sigan siendo, porque si de algo estoy seguro es que yo no defraudaré su confianza. Nos estamos viendo pronto. Punto final.

16 de julio de 2024

Un diagnóstico demoledor, no apto optimistas

 

Salvo algunas ocasionales alianzas que terminaron de la peor manera, desde el ’83 hasta la actualidad el devenir político de la Argentina ha estado signado por el bipartidismo. Radicales y peronistas se alternaron en el poder y al término de sus gestiones (aquellos que lograron completar el mandato presidencial) dejaron todo peor de lo que se encontraba antes. Hubo un momento en que apareció Cambiemos, con la irrupción de Macri que transitó por una paupérrima presidencia, y posteriormente la de Milei, aunque en el caso del Gato también fue una convergencia de partidos, entre ellos la UCR y la Coalición Cívica. La sociedad se cansó –y es natural- de estas veleidades y optó por Milei, El Loco. No importa cuán insano estuviera, ni que disparates dijera: No pertenecía a ninguna de las fuerzas políticas tradicionales y eso, quizás, fue objeto de seducción. Pensá esto: ¿Cómo la máxima autoridad del país va a proferir exabruptos, al estilo de "Me importa tres carajos", o "La economía va a subir como pedo de buzo"?

 El Peluca prometió liberar el cepo cambiario para posteriormente dolarizar, pero hoy ambas iniciativas –no tan acertadas como se supone- parecen una utopía absoluta, con la abrupta caída de reservas del BCRA. Si gobierna por cuatro años más, no tardará en anunciar que implementará reformas de segunda generación, e incluirá nuevamente aquellas con las que ya hizo campaña y que pertenecen al reino de la fantasía. Hoy por hoy, es muy poco probable que Milei se quede gobernando más allá de 2027, aunque uno nunca sabe, por ahí sorprende con algún as en la manga que logre ganarse nuevamente el favor del electorado. Y ya no quiero vaticinar lo que vendrá porque mete miedo.

Lo que se puede advertir hasta el momento es que la gestión de LLA se complace en despedir empleados públicos. Es más, por momentos tiene rasgos de cinismo: El presidente y sus acólitos pareciera que disfrutaran cada vez que él o su vocero dan a conocer el desguace, sin tener en cuenta que entre los cesanteados hay mucha gente formada, que tiene varios años de antigüedad en el Estado, y que no ejercen militancia política porque cultivan un perfil técnico. Pero aun si fueran militantes de un partido, ¿Cuál es el problema, en la medida que sean indóneos? 

No hay ningún ministerio que esté funcionando de un modo ordenado y articulado, la Cancillería es un desastre, la política económica es un calco de todo lo que ya vimos en los años anteriores. Se trata, según Caputo, de restringir la emisión de pesos para que -según la fábula que pregona el ministro- la gente no se vuelque al dólar, pero a su vez hay una recesión que es palpable por la falta de consumo, una descomunal capacidad ociosa de las industrias que deben suspender trabajadores temporariamente para evitar despedirlos, y así los porcentajes y guarismos que miden la actividad del sector continúan en caída libre. Si hay una sobreoferta de determinados bienes, es obvio que la producción de ellos se restrinja, porque ya no se vende como antes.

En cuanto a la obra pública, nadie va a negar que históricamente ha sido terreno propicio para sobreprecios y todo tipo de negociados, pero cortarla de cuajo deja al rubro de la construcción a la buena de Dios. Todos se han acostumbrado a vivir de la teta del Estado, es la fuente de financiamiento de futuras campañas, los impuestos que paga cualquier contribuyente caen en un agujero negro, eliminaron el Fondo de Incentivo Docente, y así estamos. Yo no quiero sonar temerario, pero nada me hace pensar que al cabo de un tiempo la gente no vuelva a reclamar “que se vayan todos”. Si hablamos de política fiscal, pagar el monotributo con cuotas que crecieron exponencialmente es un verdadero despropósito, sólo compensado con el incremento de los topes de facturación como premio consuelo. Luego de aquella denuncia sobre el acopio de alimentos a punto de vencerse, se avanzó poco y nada, porque esa mercadería fue entregada discrecionalmente a determinadas provincias en detrimento de otras y con una Fundación como intermediaria. El Conurbano recibió muy escasas partidas comparados con otros distritos como Mendoza, por citar un caso. Y la mayor necesidad de paliar el hambre está en el GBA.    

La visita de Milei a Bolsonaro fue lo más degradante y poco serio que he presenciado en mucho tiempo. Dos homofóbicos confesos y con delirios místicos. Es eso le doy la razón a Lousteau (otro pelotudo, ex ministro de Cristina). Por otra parte, esta gente promueve un blanqueo de capitales muy difuso con la idea de que la guita vuelva al país, pero hay que ver de dónde proviene. Milei, en el desfile del Ejército, subido a una tanqueta con su Vice es la imagen del absurdo y de la estupidez. Se creen populares porque saben que cuentan con un grupo de canales ensobrados por ellos mismos, como TN y LN+. Si bien no hay pauta directa para los medios de comunicación, Nelson Castro, el Pelado Trebucq, Jonatan Viale, Morales Solá, Luis Majul y tantos otros del “staff” deben recibir algún favor oculto por algún lado. ¿Convicciones? ¿Qué es eso? Acá lo que vale es “hacer caja”. Y esto no viene desde ahora. Cómo será todo, que me resulta más creíble Página/12 que cualquiera de los otros grandes diarios. Por lo menos hay más notas de análisis, de opinión, pero Milei jamás les concederá una audiencia o una entrevista a quienes allí escriben, porque quiere mantenerse como el gatito mimoso en su zona de confort. Para finalizar: Si continúa esta escalada diplomática con Brasil, no nos van a comprar ni una tuerca. Ellos tienen otros mercados para abastecerse, y parece ser que para los mileístas el Mercosur no es prioridad bajo ningún punto de vista. Nos estamos viendo pronto, espero que con noticias más alentadoras, que sin lugar a duda nos hacen falta. Punto final.

15 de julio de 2024

La eterna disyuntiva de no ser exitistas

Durante el fin de semana escribí bastantes notas. Y como a veces la tarea de vuelve farragosa, me puse a reflexionar sobre el tiempo que le dedico a mi trabajo y la importancia relativa que esto conlleva. Porque habrá quien escribe más rápido, o más breve, y lo quizás obtiene un resultado más prolijo que yo. Esto lo estoy pensando ahora mismo, porque cuando me pongo a redactar me concentro en hacerlo lo mejor posible y nada más, no me detengo a mirar cómo lo hace el resto.

Qué buen fútbol vimos en la final de la Eurocopa (y obviamente con la Scaloneta). Pero no me quiero ir de tema: Fue notable el gran poderío ofensivo de España para consagrarse Campeón ante Inglaterra. Un equipo que se distingue por un promedio de edad envidiable, y ello motivó que los  jugadores jóvenes que corren cada pelota como si fuera la última. Más allá de que esta parte del mundo se consiguió el objetivo y la gloria máxima, se avecina une etapa de recambio en nuestra Selección que en parte va a decantar solo. Messi es el mejor de todos, pero ya debería retirarse: 37 años de edad para cualquier futbolista de elite se hacen sentir. Claro que serán bajas difíciles de reemplazar, por no mencionar la de Di María, pero es lo normal en cualquier ciclo. Hay pibes como Garnacho que prometen muchas alegrías, aunque recién están dando sus primeros pasos y no sería justo compararlos con los que ya están por colgar los botines.

Iba a mencionar algo sobre el atentado contra Donald Trump, pero se ha hablado mucho al respecto y uno debe evitar ser redundante. Este tipo de hechos son habituales en un país donde la tenencia de armas es muy fácil y todos andan con un fierro encima. Los demócratas están en el horno, con un presidente senil como Biden que aspira a ser reelecto pero ya tiene 81 años. Por esas cosas de las reglas de la vida, deberían hacerlo entrar en razón y decirle que lo más probable es que se muera en el camino, o lo que es peor, que siga cometiendo bloopers todo el tiempo. Trump es unos años más joven, pero tampoco es un niño. Sabido es que se caracteriza por sus berrinches y destratos. En apariencia se lo nota con mucho más carisma y energía que Biden, ya que tiene un equipo de campaña que se destaca por marcar territorio y apelar a recursos claramente populistas.

Retomemos lo que decíamos en los párrafos anteriores: Argentina cumplió con el objetivo de defender el título obtenido hace dos años el Brasil, cuando en la previa muchos periodistas mediocres no pudieron con su genio, y no daban un peso por aquella conquista. Y con respecto a las demoras y el descontrol que hubo en el Hard Rock Stadium de Miami, todo ello habla pésimo de la organización. Y también de EE.UU. como anfitrión, con una desorganización peor a la de muchos partidos de la AFA, lo cual es mucho decir. Todo ello indigna aún más, si tenemos en cuenta que los yanquis se jactan de pertenecer al Primer Mundo y de ser la potencia de mayor poderío del planeta, y en tal sentido fueron muy elocuentes al deslizar casi sin disimulo que -para ellos-, los latinos somos considerados casi una raza inferior, víctimas del despojo el imperialismo yanqui. 

Para finalizar, cada conquista de la Selección nos hace sentir un poco más eufóricos, y quizás uno debería plantearse si los triunfos y toda la “manija” que se les dio a los partidos no fueron un síntoma más de la desesperada necesidad de celebrar algo, en medio de tantas pálidas y noticias desalentadoras. Esa costumbre tan nuestra de compartir una picada, un café, una cerveza o lo que sea y permanecer en una burbuja de 120 minutos sin que las profundas diferencias que nos separan no nos impidan avanzar hacia una causa común de todos los argentinos. Hay profusos antecedentes del fútbol como una maniobra de distracción para las masas, en lugar de ser un ámbito que propicie el disfrute de estar viendo un espectáculo deportivo. Eso sí: no debemos dar lugar a que las expresiones y manifestaciones populares sean bastardeadas desde la política para darle un sesgo épico a una gestión de gobierno. El fútbol, y los deportes en general, son un entretenimiento en una fase inicial y luego pasan a cobrar otro sentido cuando los atletas se convierten en profesionales o federados. Sin ánimo de hacer demagogia, yo resignaría una conquista deportiva si recibiéramos a cambio un país que merezca ser vivido, lo cual no se está dando en absoluto. Todo lo que se está destruyendo, todo el desguace que se está haciendo, llevará muchísimo tiempo en recomponerse si- en algún día no muy lejano- asume otro presidente que no les haga el juego a los Chicago Boys. Porque en siete meses de “no-gestión” nos han liquidado los bolsillos, nos han dejado en bolas, no tienen ningún plan y no me importan las opiniones tendenciosas que alguno pueda hacer de lo que estoy expresando. Insisto: No es que antes de 2023 éramos el País de las Maravillas, también había corrupción y despilfarro obsceno,  pero no podemos seguir mirando siempre para atrás. Nos estamos viendo pronto, amigos. Punto final.


Un recinto que hace rato dejó de ser “honorable”

  Nuevamente, nuestros concejales han protagonizado un lamentable espectáculo al enfrentarse con duros epítetos y con amenazas de agresión f...