Blog de Lobos, ARG, desde hace 18 años en la Web.
25 de octubre de 2008
Polaroid de locura ordinaria
Estoy en la plaza. Me siento a fumar un cigarrillo y a hacer tiempo hasta que abra un negocio. Su propietario ha dejado el infame cartelito "Vuelvo enseguida" y no sé sabe cuál es el concepto que tiene de la brevedad. Observo las otras personas que están sentadas en los distintos bancos, en particular los de las diagonales de la plaza. Chicas bonitas riéndose a carcajadas de quién sabe qué, una pareja mayor que con legítimo derecho salió a despejarse en el tramo final de su vida, un grupo de muchachos con mochilas y bolsos. Ninguno de nosotros sabe absolutamente nada de la vida del otro. Pero todos estamos ahí por algo. La Plaza 1810 es el único espacio público ubicado en el Centro de la ciudad donde uno puede estar sin tener que matar el tiempo sentándose en un bar a tomar un café. Ha conocido épocas de prosperidad y de abandono, ha sido testigo de historias de amor y del fin de una relación entre dos seres que alguna vez se juraron amor eterno. Veo a una pareja que le entrega una cámara digital a un amigo para que le tomen una foto, con la fuente de agua de fondo, como mustio recuerdo para llevar a sus lugares de origen. Muchas cosas pasan por la plaza. Cruzan sus diagonales los abogados que hicieron la plata fácil con las jubilaciones sin aportes y hoy andan trajeados y con un maletín pendiendo del brazo derecho. Detrás de ellos asoman señoras con bolsas de compras del supermercado Super Vea, que se quejan por el peso de las bolsas, porque viven lejos y no pueden pagar un remís para transportar la preciada carga. Hay gente que está sentada en otro banco, de la plaza, también como yo, pero con la mirada perdida en algún lugar, ajena a todo, pensando quién sabe qué. Todo en uno. Pequeñas viñetas de un lunes cualquiera en la Plaza 1810.
Siempre hay una buena excusa
Cuando pasan varios años sin que te encuentres con alguien y esa persona aparece súbitamente en escena, pueden suceder dos cosas: O que te...
-
El gobierno exageró alevosamente el diagnóstico para justificar el despojo. La Ley Bases que se encaminan a aprobar no hace más que trazar...
-
Cada uno alcanza la felicidad a su modo. Son episodios fugaces que nos otorga la vida y que hay que aprender a disfrutarlos, a degustarlos...
-
Que si se disculpa, que si no… Que uno saca al embajador, el otro lo deja… Todas estas idas y vueltas entre Milei y el presidente de Españ...