24 de enero de 2024

Aceptar negociar bajo presión nunca es bueno

 Mitad de semana en la ciudad. Me da la impresión de que enero está pasando muy rápido, pero al mismo tiempo no no damos cuenta de ello porque las novedades o hechos salientes son muy pocos. Hasta ahora, el calor que cualquiera percibe es el normal para el verano: 31, 32 grados. Ya si llegáramos a 36° C, como ha sucedido en los últimos años, estaríamos más complicados. Otra cosa que distingue a esta temporada, es que se está debatiendo en el Congreso la Ley Ómnibus, el DNU, y todo lo que ya conocemos. Desde el oficialismo se cansaron de afirmar que "la Ley no se negocia", pero ahora se ven obligados a hacerlo porque corren el riesgo de que no haya dictamen favorable, que no se reúnan los votos necesarios, y que todo termine naufragando. 

Así, haciéndose los boludos y en algunos casos cediendo ante la presión de sectores de peso que se pusieron el grito en el cielo de inmediato, fueron "dibujando" un nuevo proyecto, que reduce considerablemente la cantidad de artículos del texto original y da marcha atrás en otros más controvertidos. 
Cedieron ante el lobby de la industria farmacéutica, ya que la obligación de recetar genéricos amenazaba el negocio de los laboratorios, y el de los visitadores médicos. Era uno de los pocos puntos acertados -a mi modo de vez-  de este proyecto de Ley, que fue borrado de un plumazo. Lo cierto es que LLA tiene pocos legisladores propios en ambas cámaras, y se supone que el Ejecutivo era consciente de esto, pero se confió en que con los "aliados" (el PRO, algunos bloques minoritarios, y parte de la UCR) iba a conseguir los porotos. Eso no sucedió, y ahora están condicionados a continuar haciendo cambios para que la Ley en cuestión salga aprobada, maquillándola lo suficiente como para obtener los votos mayoritarios. 

Sea como fuere, en algún momento, a fines de este mes, se logrará el acuerdo para conseguir su sanción y listo, entonces habrá que ver qué pasa, porque durante todos estos 40 días, el Gobierno culpó a todo tipo de personajes por la suba del dólar blue. 

Ustedes recordarán que cuando asumió Milei, abrupta devolución mediante, se achicó la brecha cambiaria, y la divisa mantuvo así durante varias semanas, hasta que lentamente el precio del billete fue subiendo. Hoy se cotiza 200 pesos más que el 11 de diciembre, en promedio. Y mientras no haya señales claras hacia los mercados, inversores y ahorristas, seguirá en alza con pequeños "saltos" de 20 o 30 pesos diarios pero que representan un acumulado de más de un 25 % en poco más de un mes. 

Claro que si hablamos de este miércoles, tampoco podemos soslayar el paro general de la CGT, del cual se habló tanto en los últimos días respecto a su contundencia y efectividad. Creo que la sociedad tiene una pésima imagen de los sindicalistas argentinos, que dicen representar a la clase trabajadora y son unos burócratas llenos de guita, profundamente inmorales. 

Sí, es posible que si haya que esbozar una conclusión, uno diga que tuvo impacto en cuanto a la convocatoria. Pero tuvo un acompañamiento "solidario", digamos, a nivel popular, por lo que mencioné antes. A la gente que rompe las bolas que en una ciudad desquiciada como Buenos Aires todas las calles estén cortadas, que no haya transporte público, que los bancos cierren antes... Y por otra parte, ningún político que tenga experiencia, acepta negociar bajo presión. Porque si lo hace una vez, ya de ahí en adelante cualquier sector saldrá a la calle a reclamar lo que se le cante, sacando de la galera una maniobra que puede volverse extorsiva. Los Secretarios Generales de cada sindicato son elegidos con el voto de sus afiliados, pero es no quita que puedan estar 30 años o más ocupando ese rol. Debería haber, en el ámbito sindical, un límite a las reelecciones indefinidas, al igual que en la política. No sé cuánta gente que no esté vinculada a los gremios puede haber concurrido a la protesta de hoy. Pero, viendo las imágenes de TV no creo que sea -por ahora- un número significativo. 
Desde la Casa Rosada no lo perciben aún, pero si se recuestan sobre los votos del balotaje y el apoyo posterior que actualmente ostentan por haber asumido la gestión recientemente, puede haber serias dificultades de gobernabilidad. Pero ya tenemos una muestra de cómo se manejan: Actúan como "fuerza de choque" para la gilada, y luego terminan transando y dando el brazo a torcer. Si no cambian de estrategia y sólo se sienten confiados con los "dialoguistas", esto traerá más obstáculos para lograr la sanción de cualquier tipo de Ley. Ellos no lo saben porque son meros tecnócatras, pero los veteranos de la política doméstica, sí. Nos estamos viendo pronto. Punto final. 


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