30 de diciembre de 2008

Lo que vendrá....el 2009...


La pregunta podría ser: ¿Qué nos queda por decir sobre este 2008 que no hayamos dicho antes? Muy poco, tal vez. Y sin sonar contradictorios, también podríamos afirmar con propiedad que quedaron demasiadas cosas sin decir. Este no es un blog informativo, y los lectores lo saben, hay muy buenos sitios donde informarse y no me parecía interesante crear uno más. Durante estos doce meses escogí los hechos que concitaron mi atención y mi interés y los retraté en este blog, pero sin la intención de hacer una crónica periodística. Ahora, cuando falta un día para que termine el año, creo que la decisión fue acertada. Hablar de música o de las costumbres de antaño, cuando la vida parecía más sencilla, no representa un escapismo, sino parte del material que nutre este blog. Esto no significa que de vez en cuando no haya pinceladas de la realidad cotidiana. Al fin y al cabo, siempre es preferible lo heterogéneo a lo chato y acartonado. Ser consciente de lo que uno está haciendo (y esto incluye escribir) es fundamental para aportar claridad en lo que se pretende expresar. No sé cómo me encontrará el 2009. Todo tenemos un grado de incertidumbre ante "lo que vendrá", y más aún en un país como Argentina, donde no sabés con qué noticia te vas a despertar mañana. En mi caso, trato de no hacer conjeturas ni especulaciones y les recomiendo no hacerlas, porque depositar demasiadas expectativas en 365 días no conduce a ningún resultado. Hay proyectos que lleva toda una vida concretarlos y que no se pueden medir simplemente con hojas de almanaque. Hay sueños, ilusiones, esperanzas, que van más allá de lo temporal. A tenerlo en cuenta para el año que viene!!!

PD= El 31 amaneció nublado, y a media mañana comenzó a llover. Un fin de año distinto, al menos en cuanto al clima, no?

24 de diciembre de 2008

Post del 24 a la noche...

No sé si éste será el último texto de diciembre, pero tampoco esperen nada especial, sólo un par de reflexiones acerca de un año que ha resultado desastroso para la clase media y que profundiza es desgaste de los ingresos (ahora que lo pienso bien, debería haber redactado este post más cerca de fin de año, pero bueh...es lo que hay).

El país estuvo paralizado casi cuatro meses por el conflicto con el campo. Yo no me pongo en el lugar de nadie, ni de parte del Gobierno ni de parte de los productores. Pero lo concreto es que la actividad económica cayó en todas sus manifestaciones. Hubo mucha convulsión social, rumores de corrida bancaria. El dólar bajó abruptamente, por un capricho del Banco Central, y llegó a estar a $ 3,04 cuando hoy está $ 3,44 (imagínense la diferencia que se hicieron los especuladores de siempre). 

En lo que a mí respecta, qué puedo decir: Cuando un año está por concluir, trato de no hacer "balances", o sea, las típicas reseñas mentales que a veces nos dejan mal parados, con más cosas en el "debe" que en el "haber". Pero digamos que es casi inevitable pensar, porque hay momentos de tu presente que te remiten irremediablemente a ese año nefasto que querés olvidar. Por supuesto, uno siempre se consuela pensando que hay gente que la ha pasado peor que nosotros, e imagina casas arrasadas por tempestades, huracanes y tormentas. Pero es un recurso demasiado burdo a esta altura del partido, y no se obtiene ninguna satisfacción en lo personal por el hecho de que otras personas hayan estado peor.

Quizás lo mejor, para preservar nuestra salud mental, sería hacer de cuenta que este 2008 no existió, o tratar de ejercitar la "memoria selectiva" para recordar acontecimientos gratos, como los Juegos Olímpicos.
Se viene un año complicado, y no sé cuántos estarán en condiciones de ponerle el pecho a la situación. En la Argentina Siglo XXI, nunca podemos decir: "lo peor ya pasó", no vaya a ser cosa de que aparezca algo que nos haga caer todavía más bajo.

19 de diciembre de 2008

Back in high life again

Hola, gente, como va? El título de este post corresponde a un tema de Steve Windwood, muy recomendable por cierto. Tengo mis altibajos como toda persona, ustedes que aterrizan por primera vez aquí o mis fieles lectores lo podrán notar si ven textos anteriores, pero hoy me propuse que la mañana transcurra tranquila mientras tomo unos mates y preparo el trabajo para el día siguiente. No me hago ningún drama con el tema de las Fiestas, porque no me importan en absoluto y entonces esa carga que muchos llevan consigo a medida que se aproxima la fecha para mí no existe. Sí es grato compartir una cena con tus seres queridos, sin sentir la obligación de estar rodeado de gente que ya no aporta nada, me parece bastante hipócrita reunirte con alguien una vez al año con motivo de una fecha que se ha establecido para esos menesteres.
 Es un buen momento para leer, para rescatar de la biblioteca personal a autores clásicos que habían sido puestos en penitencia, para revolver la discoteca y buscar un disco de jazz, meterle un pendrive al stereo del auto para emprender un viaje con la música que te gusta si es que estás en plan Zen y necesitás un poco de paz, o bien un compilado "UP" si buscás algo que te levante el ánimo y te recuerde los lejanos días en que frecuentabas con entusiasmo las pistas de los boliches.
Tengo cajas llenas de papeles, apuntes de facultad, recortes de diarios, fotos viejas, y porquerías varias que en los días sucesivos me voy a poner a analizar para ver si hay algo que valga la pena rescatar. No me gusta juntar papeles al pedo, hay gente que guarda hasta un boleto capicúa, y yo solía hacerlo hasta hace no tantos años, pero luego me di cuenta de que no tiene ningún sentido. Un consejo: Conservá las cosas que tienen un valor afectivo para vos o que verdaderamente significan algo en tu vida, y lo demás descartalo (esto también es válido para las personas).

17 de diciembre de 2008

Todo llega... (filosofía barata)


Llegará el día en que alguien se dirija a vos tratándote de "Usted", o diciéndote señor...
Llegará el día en que descubras tu primer cabello blanco mientras te estás afeitando frente al espejo (ya sé lo que van a decir, a algunos les resultará un detalle menor pero es el comienzo de la decadencia)... y no tardará mucho en aparecer una incipiente barriga en lo que antes era un abdomen de fisicoculturista...
Llegará el día en que tus padres te empiecen a decir "por qué no te buscás un laburo", y no te olvides de ponerte traje y corbata para ir a tu primera entrevista, que será tu primera experiencia en estas lides hasta que comprendas que cuando te dicen "te vamos a tener en cuenta" no es ni más ni menos que un modo elegante de sacarte de encima...
Llegará el día en que tus pulmones y tu hígado comiencen a acusar recibo de años de excesos y efervescencia juvenil, y que te preguntes si no tendrás que comenzar a replantearte tu estilo de vida...
Llegará el día en que tus padres, por la sentencia irrebatible de las leyes biológicas, no estén más a tu lado, y te encuentres más sólo que nunca...
Llegará el día en que tendrás que tomar decisiones que van a condicionar tu futuro, y quizás dentro de esa maraña de contradicciones se esconda la decisión más difícil de tu vida...


Asimismo, un día comprenderás que los amigos de la infancia o de la adolescencia son sólo un recuerdo. Nos une a ellos un pasado en común, es el único vínculo. La amistad, al no cultivarse, ya no existe. 
 
Llegará el día en que te darás cuenta, como me di cuenta yo en su momento, de que has dejado de ser un adolescente y la sociedad burguesa te reclamará que trabajes, formes una familia, tengas hijos, una casa en un barrio de clase media y un auto. Y si es posible, un diario bajo el brazo los domingos, para "mantenerte informado" de la corrupción y la vergüenza que te sorprende al recorrer cada página dela historia cotidiana de esta Argentina desquiciada mientras vos tratás de sobrevivir y trabajás 12 horas por dos mangos, mientras la inflación carcome tus ahorros (si tenés la suerte de poder ahorrar). Ahora sí, bienvenido al mundo real.

12 de diciembre de 2008

Alguien tenía que decirlo de una vez

La belleza femenina siempre ha sido un tema complejo de analizar. En principio, seamos honestos: vamos a evitar la recurrencia de lugares comunes, como decir que "lo esencial es invisible a los ojos", ya que la experiencia me dice que lo esencial, si sos un tipo perceptivo, siempre se vuelve visible. Y esto se manifiesta en un gesto, en una situación, en un momento. La cuestión es que hay mujeres increíblemente sexies que no son conscientes de sus atributos, y hay señoritas de gran contextura física que usan prendas totalmente ajenas a su voluminosa anatomía. A la mayoría de los hombres (tímidamente me incluyo en la lista) les agrada una mujer de busto generoso, rasgos faciales armoniosos, piernas delgadas y glúteos prominentes. Las mujeres lo saben, e intentan recrear ese ideal de belleza para convertirse en objetos de deseo, pero a menudo se equivocan, ya que en ese afán lo único que hacen es pintarrajearse y afearse, generando una impresión aún peor que la que uno tenía en un principio acerca de la dama en cuestión.
A todos nos gusta seducir y ser seducidos, y se hay escrito innumerables libros con supuestas "técnicas" para conquistar a una dama, que también suelen denominarse "trucos" o "secretos". La realidad es que ya está todo inventado, y cada día me convenzo más de que la belleza exterior juega un rol decisivo en la atracción entre dos personas. Por supuesto, si además de eso tenemos la suerte de encontrar a alguien que piensa, que razona, que se interesa por lo que hacemos y que comparte nuestras metas y objetivos en la vida, mucho mejor.

5 de diciembre de 2008

Ascenso y caída de "Los exitosos Pells"


Confieso que en sus comienzos seguí -con más entusiasmo que expectativa- los episodios de "Los exitosos Pells", programa que debería emitirse por Telefé a las 22.30 pero que, salvo en el debut del ciclo, invariblemente comienza más tarde, por esa costumbre que se han tomado los canales de aire de no respetar la grilla. Además, cómo decirle que no a la "diva" por excelencia del canal, Susana Giménez, que tiene su programa en la franja horaria anterior. Me seducía ver nuevamente en acción a Carla Peterson, como así también el hecho de que esta suerte de telenovela se desarrolla en un canal de noticias. Pronto se advirtió un exceso de clichés propios de cualquier telenovela, con la única diferencia de que transcurren en el ámbito de un noticiero. También resulta evidente la intención por prolongar al máximo la tensión sexual entre los dos protagonistas (Carla Peterson y Mike Amigorena) y llevarla al extremo de lo imposible y de lo inverosímil. El programa está muy bien producido y tiene una estética muy cuidada, con muchos exteriores y abundante uso de la PNT (lo que en la jerga se conoce como "Publicidad no tradicional"). Si el éxito del rating continúa, es muy probable que los guionistas decidan estirar la historia lo más posible para sacar rédito de esta circunstancia, y esa intención ya se está comenzando a percibir, mucho antes de lo que normalmente sucede en este tipo de formatos. Se nota que Carla Peterson no puede brillar con todo su potencial como en "Lalola", lo cual es previsible si tenemos en cuenta que en aquel programa ella era la protagonista absoluta. No obstante, en estos momentos es la actriz más popular de la Argentina, y tiene un sólida formación teatral que de una forma u otra intenta sacar a relucir en cada situación, lo cual no me parece mal. El programa en sí ha entrado en una meseta, empezó muy bien, sustentado por un interesante elenco y una idea original (aunque no del todo, me hace acordar mucho a los comienzos de "Primicias", por Canal 13). Pero ahora se ha convertido en cualquier cosa. Es una pena, porque las fallas (si es que cabe el término) son fácilmente reconocibles para cualquier persona que haya visto una telenovela de las cinco de la tarde. Adolece de los mismos vicios, de las mismas intrigas que ya hemos visto una y otra vez, del tira y afloje entre dos personajes que se sienten traicionados, manipulados, etcétera, pero que seguramente terminarán juntos al final de la tira. Desde luego, mientras el rating los siga favoreciendo, los guionistas seguirán por el mismo cauce, la pregunta es qué sucederá cuando la historia comience a agotarse y deban echar mano a otros recursos.

2 de diciembre de 2008

Regocijo innecesario en el mes de las "fiestas"

Martes en la ciudad. Es una mañana fresca y ventosa, y mis neuronas tratan de ponerse de acuerdo entre sí en este comienzo del día. Hoy me propuse no  hacer ninguna enérgica arenga, ni  quejarme de algo en particular, simplemente escribo por el placer que me produce. Todavía me cuesta darme cuenta de que ya estamos en diciembre, con todo lo que ello implica y que hemos desarrollado en posts anteriores. Pero las sucesivas crisis han logrado (digamos que es el único "mérito" que les adjudico) que la gente tome a las Fiestas como un día más. Nada de banquetes, de regalos ostentosos, de gastos inútiles en pirotecnia. No hay plata, de manera que no hay presupuesto para celebrar "a lo grande", como alguno suponen. Pero tal vez lo único rescatable de esos días (Navidad y Año Nuevo) es que estés en compañía de la gente con la cual realmente te une un vínculo afectivo, y todos sabemos que esas personas no son necesariamente tu familia (tíos, primos y demás).

 Hay muchos amigos que por distintos motivos están distanciados de sus familias y pese a ello se juntan a compartir una sidra y un pan dulce. Creo que lo hacen porque es casi un imperativo para la ocasión. Habrá otros que realmente padecen la llegada de las Fiestas porque lo consideran una mera farsa de bondad y obsecuencia. Lo mejor, de darse este último caso, es hacerse el gil, y bancársela por unas horas, e intentar pasarlo lo mejor posible. El día que entendamos esto, seremos capaces de juzgar menos y de aprender más.

30 de noviembre de 2008

Valió la pena esperar.... (por Ramiro Leiva)

Caro, ¿pero el mejor? Así encabezó el periodista de ese diario capitalino (que tiene la puta costumbre de “digitar” el humor y el pensamiento de los argentinos todas las mañanas con sus titulares), la nota con la que realiza la crítica a Chinese Democracy, el nuevo disco de Guns N’ Roses.

Caro: 14 millones de dólares para 14 años de producción de un disco. ¿Pero el mejor?, se pregunta este periodista, que ni me acuerdo el nombre. ¿El mejor de que? ¿De todos los tiempos? ¿El mejor disco de la Banda? ¿Que Banda? ¿Guns N’ Roses?. Sí, de Guns N’ Roses. Sí….Guns N’ Roses….bahh….en realidad…Axl Rose con un montón de músicos y productores que hicieron el disco. No señor. Es Guns N’ Roses, le guste a quien le guste, sin Slash, sin Duff, sin los demás….lamentablemente, pero también es Guns N’ Roses. Así dice el disco, así se presentó la banda en vivo durante estos años anteriores a la salida del LP. Así pagó Axl también todos los derechos y el nombre de la banda, para quedárselo y para usarlo. Evidentemente a los viejos amigos y músicos tampoco les importó eso, porque de haberles importado, se hubiesen negado a vender los derechos, así de sencillo.

Por supuesto que a los nostálgicos y “enfermitos” de la banda como yo nos hubiese gustado que el grupo siga funcionando con los mismos miembros. Pero cuando no se puede, no se puede. Cuando la química se va, se va. Cuando priman distintos intereses, las cosas nunca salen como antes; entonces: Now I know you better. You know I’d know better. Now we all know better. Así dice un tema que se llama “Better” y no creo que sea para alguna mina, estoy convencido que se lo ha escrito a Slash….pero bueno, eso es lo que yo creo y no importa demasiado.

Pero ese no es el tema. El tema es tratar de despojarse un poco de si fue caro, fue barato, si tardó demasiado, si tardo poco….Basta!!! Déjense de joder un poco. Tengo 28 años y la mitad de mi vida, me la pasé esperando este disco…..y se supone que debería decir lo que han dicho todos: ¿Tanto tiempo para esto?. NO SEÑOR!!!! Yo digo: Valió la pena tanto tiempo!!!!

Este periodista realizó toda la crítica leyendo los créditos que trae el librito del CD y, según parece, no debe haber escuchado ni la mitad de los temas: Dice por ahí: “…ese tema tiene 6 guitarras…¿para qué si con Salsh solo alcanzaba…? No señor…está usted muy equivocado. Lo dice solo porque lo leyó en los créditos y no porque tenga un “oído privilegiado para diferenciar 6 guitarras en un tema”. Y así lo tuviese, nunca hubiese escuchado las 6 guitarras. Porque si se hubiese puesto a escuchar un poco realmente, se hubiese dado cuenta que las 6 guitarras (o los 6 guitarristas que tocan) no lo hacen al mismo tiempo: es más que evidente que lo que tocan son partes diferentes de la canción!!!. Quizá puedan sonar 3 violas al mismo tiempo, con algún arreglito prolijo dentro de algunos riffs zarpados que tienen algunos temas…pero ¿6 guitarras a la vez? ¿para qué……? dijo un santiagueño (aunque de ninguna manera niego que exista esa posibilidad también…las búsquedas musicales son infinitas). Evidentemente Axl sigue generando lo mismo que hace más de 20 años en los periodistas…..bronca, envidida, que se yo….no sé que pueda ser. Lo que tampoco se puso a hacer el periodista es leer los créditos, y menos escuchar, los temas de los viejos discos. Porque en muchos de ellos también hay más de 3 o 4 guitarras grabadas….por Slash o Izzy, o algún invitado…En los discos Use your illusion I y II es muy claro. Hay no solo muchas guitarras sino muchos arreglos de orquesta, muchos pianos, y muchos otros instrumentos. El tema sería ver qué “onda” se le quiso imprimir a cada disco en cada momento. Quizá este disco haya tardado mucho, sí, demasiado….sobre todo para los que realmente lo esperábamos, pero se olvidan de que desde el 88 al 91 que salieron los “Use Your Illusion” la prensa dio en llamar esa era como “el interminable melodrama de los Guns N’ Roses”. ¿Qué habrá quedado para ahora? Siempre fueron “desprolijos” si se quiere, con la continuidad de las grabaciones, pero no por eso sus discos van a ser “malos” o “regulares” o “decepcionantes”, como los han tildado algunos.-

Puede que, como dicen algunos de estos periodistas, Axl haya buscado la perfección y, obviamente, este disco no sea “perfecto” (andá a saber también lo que es “perfecto” para estos tipos). Pero creo que si lo que buscó era hacer un muy buen disco con una muy buena producción y performance, lo logró.

Hay que ESCUCHAR. Es sólo eso: ESCUCHAR EL DISCO. Yo lo hice y ¿saben qué? El pasar por los 14 temas me hizo olvidar de las comparaciones entre nuevos y viejos músicos, entre lo mucho o lo poco que tardó en salir. ¿Saben por qué? Porque en esos 14 temas escuché a Led Zeppelin, Deep Purple, The Who, Aerosmith, Pink Floyd, Elton John. Escuché a los Beatles, a los Stones y a Queen. Escuché a Nirvana, a Metallica, escuché a los Red Hot Chilli Peppers, a Nine Inch Nail y a Jane’s Adiction. Escuché a Korn y a Papa Roach y a muchas otras buenas bandas. Los escuché a todos. Escuché blues, escuché baladas, escuché hard rock, escuché metal, escuché música disco, escuché rock industrial y escuché muchos otros estilos.

Perdón muchachos, estuve escuchando Guns N’ Roses.

Ramiro Leiva

28/11/08

28 de noviembre de 2008

Quién le pone el cascabel al gato?

Pocas veces en mi vida suelo quejarme de los avatares meteorológicos (frío, calor, granizo, etc.) salvo que se trate de una catástrofe que por su magnitud ponga en peligro la vida de las personas. Pero debo decir que lo sucedido ayer, con más de 40º C de sensación térmica, me superó. El Ministro de Planificación, con un cinismo envidiable, aseguró a los medios (palabras más, palabras menos) que él y su "equipo" tiene todo controlado y afirmó sin ruborizarse que los cortes de luz que se produjeron en varios barrios de Capital Federal son casos aislados. Uno podría decir: "Está bien, el tipo por lo menos dio la cara, en un momento es que los usuarios querían prender fuego a EDENOR, EDESUR y demás empresas", pero no es ése el caso. En realidad, era lo menos que podía hacer, era su obligación, para eso cobra el sueldo que cobra y además su cartera tiene el presupuesto más alto dentro de los Ministerios del Ejecutivo. las empresas alegan que para propiciar nuevas inversiones se haría necesario aumentar las tarifas, lo cual me resulta una falacia total. El sistema energético debe estar preparado para cualquier contingencia, y esto incluye una "ola de calor" como la que padecimos. Supongamos -por ejemplo- que viviéramos en el Caribe. ¿A alguna empresa seria de esos países se le ocurriría esbozar semejante argumento para justificar un apagón masivo? Pero lo peor está por venir, porque todavía no empezó el verano y el paciencia de la gente -con toda razón y justicia- se va colmando a medida que se percibe ese sabor a historia repetida, a improvisación, a ineptitud, a no hacerse cargo de nada. ¿De qué sirvieron estos cambios de huso horario que se fueron dando? La gente no usa ventiladores o equipos de aire acondicionado porque tiene ganas de joder, sino porque sufre de temperaturas agobiantes y tiene todo el derecho de emplear dichos electrodomésticos para refugiarse de unas marcas térmicas a las cuales no estamos acostumbrados. Una vergüenza más en el país del "vale todo".

25 de noviembre de 2008

Un país con un serio desequilibrio emocional


Emprendo la actualización de blog en horas de la mañana, dado que en el lugar donde dispongo de la PC las temperaturas lo asemejan a un sauna, y ni siquiera la tenue brisa del ventilador de techo puede paliar la situación. Bueno, como es de público conocimiento, pasó la euforia exitista/triunfalista de la Copa Davis y la posterior decepción, nuevamente aparecieron quienes daban al equipo argentino como favorito y hoy hacen leña del árbol caído. ¿Por qué no dijeron las cosas en su momento si es que realmente dudaban de la capacidad de Del Potro para afrontar el singles? Ahora el "cabaret" (al mejor estilo Boca) tiene como estrella invitada a Nalbandian, a quien le atribuyen haberse trompeado con Del Potro en los vestuarios, querer cobrar más dinero que el resto de la delegación, y quejarse hasta el último día de su vida porque la Davis no se hizo en Córdoba, ciudad donde -al parecer- lo une algo más que sus afectos, sino los negocios y la amistad que tiene con el Intendente de la capital de aquella provincia. No tenemos términos medios: si hubíeramos ganado, seríamos los mejores del mundo. Como perdimos, hay que quemar en la hoguera a todo el plantel. ¿No podremos dejar de ser tan drásticos, tan de "a todo o nada"? El periodismo deportivo, salvo algunos casos muy puntuales, me parece un asco. Creo que son carroñeros a más no poder, y que se regodean con los éxitos y fracasos de los jugadores según les convenga. Mientras tanto, el país entra en piloto automático, navegamos a la deriva, crece el desempleo, las fábricas suspenden empleados y el Vicepresidente Cobos impulsa un plebiscito para que la gente decida si debe seguir ocupando ese cargo o no. Sinceramente, una vergüenza, de principio a fin.

19 de noviembre de 2008

Crónicas deportivas y raros peinados nuevos


Acabo de ver el partido de la Selección frente a Escocia, en lo que se ha dado en llamar "la era Maradona", por tratarse del primer match que dirigía el Diez. Hacía tiempo que no había tanta expectativa por un partido no oficial, y debo confesar que yo también esperaba con ansiedad ver a los jugadores en la cancha, más allá de que estoy lejos de considerarme un fanático del fútbol. Sin perjuicio del resultado (0-1 en favor de Argentina), el partido me dejó conforme. Nótese que la mayoría de los periodistas deportivos mediocres que por fruto del azar tienen espacio en la radio y la TV daban a Escocia como la "cenicienta", como un equipo débil y de segundo orden, y sin embargo se mostró aguerrido e incluso tuvo alguna chance de empatar. Fue un partido parejo, con una superioridad argentina que se dio no sólo en el marcador, sino en el juego, pero que no fue suficiente para hablar de "un equipazo". Pero, al menos, una alegría, un triunfo, le ganamos a alguien, no dimos lástima como contra Chile, y si Maradona no cae en un desiquilibrio emocional puede que la cosa funcione bien. Por primera vez en mucho tiempo vi a los jugadores argentinos disputar un partido con ganas, más allá de las limitaciones propias de cada uno, pero -para ser más precisos- con huevos, sabiendo que todo el país estaba pendiente de ellos, cuyas piernas valen millones de euros y gozan de todo tipo de privilegios en los clubes donde juegan. No suelo redactar "crónicas deportivas", pero siempre hay una excepción a la regla, y ahora la expectativa está puesta en el tenis, más precisamente en la Copa Davis, evento que provoca una inevitable ansiedad en el espectador porque toda la semana estuvieron los corresponsales en Mar del Plata hablando boludeces (lo que se conoce como "la previa") o haciendo notas con los jugadores, bajando línea acerca de la supuesta inferioridad de España (veremos cuando llegue el momento si es tan así) y haciendo uso de una arenga nacionalista sin ningún sentido. Ojalá que ganemos la Copa, y que si nos toca perder, sea con dignidad, pero sepan los señores periodistas que la vida continúa y que la inseguridad, la inflación y el desempleo tienen mucha más relevancia en nuestras vidas que tres días en una cancha de tenis.

15 de noviembre de 2008

Sábado a la noche...

El sábado a la noche implica distensión, descanso, y el deseo de pasar un rato tranquilo en compañía de amigos o bien de la familia, incluso para aquellos que- como yo- ya estamos "retirados de las pistas" y no frecuentamos los boliches asiduamente. Quizá ese mero capricho del calendario, que hoy es sábado, me motiva a escribir. La mañana me recibió con un día frío y extremadamente ventoso, lo cual hizo que deba ir en busca de las cajas donde había guardado prolijamente la ropa de invierno para proveerme de algún suéter o indumentaria similar que me permitiera salir a la calle sin estar estornudando a cada paso. Los posts son como botellas lanzadas al mar, uno los redacta y no tiene la menor idea de quién los va a leer, pero eso es algo a lo que ya me acostumbré: forma parte de los blogs y de la naturaleza intrínseca de éstos.
Servicio a la comunidad: A los menores de 25 años les recomiendo que estén atentos a las becas del bicentenario, se trata de un programa del Ministerio de Educación de la Nación que financia el estudio de determinadas carreras que el Estado considera prioritarias. Es una buena oportunidad, entré al sitio y por mi edad obviamente no tengo posibilidades de aspirar a una de ellas, pero traten de no dejarlas pasar. El sitio web es: www.becasbicentenario.gov.ar y la información acerca de los requisitos y de las carreras que se ofrecen en bastante completa. Me parece una buena manera de fomentar el estudio de carreras que tienen poca demanda y que en el mercado laboral actual son muy requeridas. De modo que no esperen encontrarse con Derecho o Contador Público, sino con todas (o casi todas) las ramas de la Ingeniería, por ejemplo. Alguien podrá decir que el dinero de las becas resulta insuficiente ( de $5.000 a $ 10.000 anuales), pero considero que no deja de ser un incentivo en medio de esta superpoblación de abogados, médicos y contadores.

Nota mental: Hoy es un buen día para escuchar el histórico show de Bruce Springsteen en el Nassau Collisseum, el 28 de diciembre de 1980 (Por Dios, ¡Cómo pasa el tiempo!) . Está disponible en Internet. Bájenlo y disfrútenlo. Si lo consiguen, después me cuentan.

9 de noviembre de 2008

Hablando de bueyes perdidos (parte 2)

Domingo por la tarde. Treinta grados a la sombra, me dirijo a la Plaza 1810 por ser un espacio público cercano a mi domicilio en el cual se puede fumar y ver disfrutar el gratuito pasatiempo de ver la gente pasar y hacer una suerte de ejercicio observacional. Me pongo a conversar con el placero de turno. Un hombre digno, simpático, que se acerca con una sonrisa hacia el banco donde me encuentro sentado para cambiar unas palabras conmigo. Un momento grato, sin dudas, un encuentro efímero entre dos generaciones que crecieron en contextos completamente distintos pero que mantienen los valores que nos hacen suponer por un momento que la sociedad no está totalmente desquiciada. 

Ese hombre, con su sencillez y su modestia, sin condicionamiento alguno, se acercó a conversar conmigo, y a hablar sobre bueyes perdidos. Qué bueno es encontrar un momento de distensión cuando uno menos lo espera, darnos cuenta de que no estamos tan solos, de que esa persona entrada en años padece los mismos problemas y encuentra el mismo placer en las cosas que quien esto escribe, a pesar de que nos separan más de 30 años de brecha generacional. El diálogo fluye naturalmente, y el anónimo placero escucha, y devuelve lo que uno dice con un comentario certero y que ostenta la experiencia que le ha dado la vida. Ojalá haya más personas que puedan conectarse más allá de la brecha generacional y descubrir que detrás de toda una historia de vida personal existen episodios que nos marcan, y que nos impulsan a actuar de otra manera. Yo no tengo dificultades para relacionarme con personas mayores, aunque debo reconocer que cuando se dejan invadir por la nostalgia se vuelven un poco intolerables. Quizás suceda porque están transitando la última etapa de sus vidas y les aflige ver un presente que va en contra al esfuerzo que ellos pusieron para salir adelante. Punto final. 

8 de noviembre de 2008

Monólogo rabioso express

Si hay algo que me indigna de los supermercados en general es el infame cartelito que reza "Sonría, lo estamos filmando". Encima de que me están filmando, tengo que sonreír? A quién se le ocurrió la brillante idea de diseñar esos carteles? Supongo que a algún infradotado que tiene la convicción de haber hallado una manera "graciosa" de notificar a los clientes de que hay cámaras de seguridad en el local.
Ir al supermercado es todo un tema. Luego de elegir las cosas que vas a comprar, hacés la cola en una caja, que suele ser la única habilitada en ese momento. Cuando te faltan diez centímetros para llegar a la meta, habilitan otra, lo cual te hace sentir como un pelotudo. Las bolsas son de pésima calidad, generalmente te las cobran y si llevás tres o cuatro botellas de la bebida que sea, es muy probable que el delgado polietileno de las bolsas ceda con la probable rotura de las botellas en cuestión. Podés llevar tu propia bolsa de tela para evitar esto que acabo de exponer, pero no hace a la cuestión. Si te están cobrando por cada una de ellas, deben ser de una calidad aceptable.


Es bastante frecuente qu haya alguien delante tuyo en la caja que se olvidó la plata, o que quiere pagar con tarjeta de débito y se olvidó el PIN, o que no trajo el DNI para efectuar la compra con la tarjeta de crédito, o que a último momento vuelve a las entrañas del supermercado a buscar un botella de vino o un pedazo de queso, y vos, que a lo sumo llevarás tres boludeces, te quedás esperando. A nadie le importa, a nadie le preocupa. El tiempo tuyo no vale, porque vos compraste tres cositas y el tipo que está adelante lleva el changuito lleno. De más está decir que en la despensa de mi barrio estas cosas no pasaban.

6 de noviembre de 2008

Basta de renegar de todo!

Hay gente que pareciera buscar afanosamente motivos para quejarse. Para empezar, todos padecemos el calor en verano y el frío en invierno, y eso ha sido así desde hace millones de años. Recordemos que existe una teoría según la cual los dinosaurios se extinguieron por un abrupto cambio climático que impidió su supervivencia. Ahora bien, en 2008, cuando lo único que queda de los dinosaurios son sus huesos en los museos, ¿De qué nos asombramos? ¿Cuál es el motivo genuino de la queja constante, de la disconformidad permanente ante cualquier situación que se presente y que vaya en contra de nuestros deseos? Conforme avance el verano, empezarán a escasear las noticias, y los medios se aferrarán a un crimen que reúna suficiente morbo (si es pasional, mejor, y si incluye sexo, mejor aún) al estilo del de Nora Dalmasso, para castigarnos en los noticieros sin piedad. No se sorprendan si también aparecen pedidos de extradición insólitos, como el de la viuda de Perón, o si la guerra de las vedettes en la temporada estival domina la pantalla. A mí en particular el verano me resulta indiferente, es decir, trato de pasarla lo mejor posible en mi casa a sabiendas que no puedo irme de vacaciones. Hoy, por ejemplo, es jueves, pero estuve la mitad del día convencido de que era viernes. Pero para no provocar el natural fastidio en los lectores, no quiero volver al remanido tema de los días de la semana. Nota mental: Hoy es un momento ideal para escuchar un buen tema de Bruce Springsteen o algo más melódico onda Sergio Dalme  mientras tomás un vaso de Cinzano con soda y abundante hielo.

3 de noviembre de 2008

El fulgor de lo imaginario (parte 2)


Espero que Dios me conceda hoy un lunes tranquilo y sin sobresaltos como el anterior. Aquí estoy de nuevo, emprendiendo la grata tarea de actualización del blog con el primer "post" de noviembre. Notará el lector que en la crónica cotidiana he dejado pasar por alto hechos que generaron gran impacto mediático, como la infame designación de Maradona como DT de la Selección, que fue entusiastamente apoyada y defendida por... él mismo. Charly García se recupera, pero de sacar un disco nuevo ni hablar. Tiene material inédito de sobra como para editar un álbum triple si así lo quisiera, pero por alguna extraña razón ha decidido esperar el momento. Creo que la discográfica EMI no le tendrá mucha paciencia y en cuanto salga a la luz el último disco que falta para cumplir con el contrato, dará por concluido el vínculo con el señor García. Hay que ser muy cuidadosos (digo esto desde el lado del Gerente de una discográfica) con el manejo del material que se produce en los ensayos e incluso con el master original, dado que manos anónimas pueden filtrarlo por Internet en cuestión de horas. Así le sucedió a García con su archiconocido "Kill Gil", que nunca vio la luz oficialmente y que algunos suponen que tomó estado público en forma clandestina como una forma de "vendetta" de su hijo Miguel. La verdad de los hechos la conocen ellos dos y nadie más, lo concreto es que un álbum de un artista como Charly García merecía mejor destino que ser pirateado con un pésimo sonido y un arte de tapa barato y de mal gusto que remite inevitablemente al poster de la película "Kill Bill".

31 de octubre de 2008

Manhattan, por fin estás conmigo


Por fin, tras un largo peregrinar, conseguí la película "Manhattan" (1979) de Woody Allen. Y aquí hago un paréntesis, no me importa la vida personal de Allen (y esto incluye la inevitable referencia a su matrimonio con su hija adoptiva), no soy su amigo ni tengo el gusto de conocerlo. Pero sí tengo el gusto de disfrutar de su arte. Incluso las películas mediocres de Allen (que las hay, nobleza obliga) son, a mi criterio, superiores a los éxitos de taquilla al estilo de "Spiderman 3" (no es necesario fundamentar los motivos). Manhattan es una pieza de colección que no puede faltar en ninguna filmoteca. Me costó mucho (dinero y esfuerzo) conseguir el filme antes mencionado, pero lo tengo como un tesoro porque realmente es admirable. Nunca la había podido ver completa: las veces que la proyectaban por I-Sat, por ejemplo, siempre la enganchaba promediando los 30 minutos. Estoy feliz de haber comprado este DVD, como así también maldigo la hora en que compré 2001: Odisea del Espacio, un bodrio absoluto, y que me perdone Stanley Kubrick donde quiera que esté. Seré sincero: miro lo que me gusta, no soy un cinéfilo, pero me fascinan las películas de la década del '70. Es gratificante saber que por fin encontrarse algo que creíste no poder hallar nunca, sobre todo en los videoclubes abarrotados de basura comercial y facilista. "Manhattan" es modesta y pretenciosa a la vez, y eso la hace una gran película. Magnífica fotografía. Excelente banda de sonido (George Gershwin bajo la batuta de Zubin Metha), soberbias actuaciones, un elenco de primer nivel, y el encanto del blanco y negro. Deslumbrante. Como dije antes, Allen la pifió un par de veces, y he visto sus últimas películas con la nostalgia que produce el saber que algo se ha perdido. Pero yo creo firmemente en la idea de rescatar lo valioso de las personas, por eso admiro a Michael Jackson y me cuesta reconocerle algún mérito a Madonna, más allá de que es obvio que los tiene. Cine y música pueden fusionarse de un modo admirable, y eso es lo último que diré sobre "Manhattan": si la ven por ahí, no la dejen pasar.

28 de octubre de 2008

Preguntas en sobredosis












¿Cómo sería nuestra vida si los días de la semana, o incluso los meses, no tuvieran nombre? ¿Tendrían la misma connotación negativa que tienen, o nos dejaríamos vivir a suerte y verdad? ¿Perder la noción del tiempo nos ayudaría a superar viejos rencores, a olvidarnos de los planes y proyectos que sabemos claramente que nunca lograremos concretar, o sería una mera licencia poética? Quizás sean demasiadas preguntas para un solo posteo. Lo más difícil de aprender, es que cuando una rutina te agobia, puedas buscar otra que la sustituya. Pienso que quitarles denominación a los días nos llevaría a un desconcierto total. Hace poco pasé todo un viernes convencido de que era sábado, y sólo por la noche me di cuenta de que había actuado como suelo hacerlo un sábado. No noté grandes diferencias, pero tal vez, parte del orden que buscamos consista en ponerle nombres a las cosas.

Hay muchas canciones que aluden a un determinado día de la semana, ya sea en el título o bien en la letra. Y no es casualidad. Los artistas son personas como nosotros, con más dinero seguramente, pero si realmente son artistas y saben palpar el pulso de la realidad, sienten ese agobio, de tener que dirigirse al público que pagó su entrada para el teatro y procurar que la gente se distienda durante el tiempo que dure la función. Expresar en música lo que te genera un día en particular no es algo sencillo, aunque muchos lo han intentado, sin éxito. Recuerdo a Sui Generis, con su magnífica postal del Buenos Aires de principios de los '70, en "Lunes otra vez". Ese "otra vez" implica, resulta obvio decirlo, repetición. Otra vez lo mismo. Otra vez la rutina. Otra vez el laburo. Otra vez a vestirse para ir a la oficina. Otra vez a discutir con gente de mierda con la cual compartimos el espacio laboral. Otra vez a ponerme ese horrible uniforme amarillo y rojo de la Estación de Servicio Shell. Otra vez a sentir que soy el engranaje de una máquina que funciona al compás de Wall Street. Pero, sin embargo, sin una rutina nuestra vida sería bastante caótica. Sin que ello implique ser tirano de los horarios, necesitamos cierto orden, como decía al comienzo.

 Esto nos permite otorgarle a cada actividad su tiempo y su lugar, dentro de una determinada franja horaria. Hay gente que tiene rutinas de las cuales depende su propia salud, por ejemplo un esquema de medicación diario. Las pastillas de cualquier índole no son buenas o malas en sí mismas, en la medida que te ayuden a vivir mejor. Creo que no hay mucha vuelta en esto. 

El tema es que vivimos en una sociedad que cada vez más "empastillada", dado que no encontramos una manera mejor de bajar un cambio para afrontar el día siguiente. No está mal que un día te tomes un Rivotril para poder dormir, sí tenés que pensar en que no podés hacer eso todos los días a menos que sea medicación recetada. Las pastillas también te llevan a una adicción, y es fundamental tener conciencia de eso. Son drogas legales que se venden en las farmacias, y cada vez vas a necesitar una dosis mayor para lograr el mismo efecto sedante. A no joder con eso, que es peligroso. Ver a una persona dopada es más shockeante que ver a un borracho o a un consumidor de merca (me ha pasado, por eso hago hincapié en esa percepción). Vos pensás que está todo bien, pero los que te rodean te ven pésimo, excepto que estén igual o más dopados que vos. Claro que es un tema que daría para largo, y no para dejarlo en suspenso hasta la próxima ocasión. Pero a la vez, no siempre es bueno juzgar a nadie sin conocer los motivos. Nos estamos viendo pronto. Punto final.


27 de octubre de 2008

Reflexiones de un lunes tranquilo

Un lunes tranquilo. Eso fue todo lo que pedí ayer y -afortunadamente- todo lo que me ha sido concedido al momento de redactar estas líneas. Por supuesto que no podés evitar que los factores externos te afecten, pero con la mera predisposición de intentar que todo te resbale, salís ileso del maldito lunes y seguís la semana como si nada. Cambiando de tema: ¿Dónde están los cantantes mal llamados "de protesta", de crítica social, supuestamente comprometidos con la realidad que les toca vivir? Al único que veo en pie es a León Gieco, un tipo con el que podés estar de acuerdo o no, pero que durante toda su carrera ha sido coherente con su modo de pensar, plasmado en sus canciones (ahora ha asumido el rol de niñera de Charly García, lo cual no está mal hasta cierto punto). Digo esto porque estoy escuchando el histórico concierto de Pablo Milanés y Silvio Rodríguez en Argentina, en el estadio de Obras Sanitarias, en abril de 1984 (plena primavera alfonsinista), con Víctor Heredia, León Gieco y Antonio Tarragó Rós como invitados. Más allá de los videos, de los discos, qué ha quedado de aquel discurso, de aquella postura ideológica pre-Caída del Muro, del Movimiento de Países No Alineados, de esos "ideales" que lograron conmover a toda un generación? Les anticipo que no tengo la respuesta.

25 de octubre de 2008

Polaroid de locura ordinaria

Estoy en la plaza. Me siento a fumar un cigarrillo y a hacer tiempo hasta que abra un negocio. Su propietario ha dejado el infame cartelito "Vuelvo enseguida" y no sé sabe cuál es el concepto que tiene de la brevedad. Observo las otras personas que están sentadas en los distintos bancos, en particular los de las diagonales de la plaza. Chicas bonitas riéndose a carcajadas de quién sabe qué, una pareja mayor que con legítimo derecho salió a despejarse en el tramo final de su vida, un grupo de muchachos con mochilas y bolsos. Ninguno de nosotros sabe absolutamente nada de la vida del otro. Pero todos estamos ahí por algo. La Plaza 1810 es el único espacio público ubicado en el Centro de la ciudad donde uno puede estar sin tener que matar el tiempo sentándose en un bar a tomar un café. Ha conocido épocas de prosperidad y de abandono, ha sido testigo de historias de amor y del fin de una relación entre dos seres que alguna vez se juraron amor eterno. Veo a una pareja que le entrega una cámara digital a un amigo para que le tomen una foto, con la fuente de agua de fondo, como mustio recuerdo para llevar a sus lugares de origen. Muchas cosas pasan por la plaza. Cruzan sus diagonales los abogados que hicieron la plata fácil con las jubilaciones sin aportes y hoy andan trajeados y con un maletín pendiendo del brazo derecho. Detrás de ellos asoman señoras con bolsas de compras del supermercado Super Vea, que se quejan por el peso de las bolsas, porque viven lejos y no pueden pagar un remís para transportar la preciada carga. Hay gente que está sentada en otro banco, de la plaza, también como yo, pero con la mirada perdida en algún lugar, ajena a todo, pensando quién sabe qué. Todo en uno. Pequeñas viñetas de un lunes cualquiera en la Plaza 1810.

De la memoria selectiva

¿Qué hay de cierto acerca de la "memoria selectiva"? Reconozco mi ignorancia absoluta en el tema. Sería posible borrar de nuestra mente las humillaciones y los papelones y dejar disponibles los momentos gratos y felices? Busqué en Internet y no encontré nada que tuviera el mínimo rigor científico, sólo textos redactados por personas con la misma inquietud que yo. Leí en Clarín que están experimentando con ratones una droga que tendría un efecto parecido al que acabo de describir, pero nunca podremos saber si los inocentes roedores borraron de su mente cuando fueron atrapados por una trampera o cuando tuvieron un desengaño amoroso, que es lo que uno quisiera hacer trasladándolo al género humano.

Profundizando sobre el tema, podría decir que no sólo aquellos hechos bochornosos suelen aparecer en nuestra mente de vez en cuando. Siempre hay un disparador, algo que nos remite a esos momentos. Y tengo la satisfacción de atesorar en la memoria recuerdos gratos, que también sobrevienen cuando recapitulamos y comprendemos que la vida tiene matices, que se construye en base al anecdotario que el mismo devenir cotidiano nos va prodigando. Pero como reza la célebre canción, "Me puedo programar". Podemos entrenar el bocho para que el paso del tiempo vaya desdibujando aquellas torpezas, o la primera vez que nuestra pareja dio por terminada una relación.... que quizás dolieron años atrás pero fueron un estímulo para crecer.

Probablemente, si tuviéramos una "papelera de reciclaje" para esos pensamientos recurrentes, todo resultaría más sencillo. Pero no somos Windows 10, somos humanos y mortales. Punto final. 

24 de octubre de 2008

La Caja de Pandora

A menudo, revisando los cajones tras un largo tiempo de almacenar objetos inútiles, uno se pregunta en qué estaba pensando al momento de comprar tal o cual cosa que emerge, con aire inocente, al momento de emprender la tarea de hacer la típica "limpieza". Me he vuelto más selectivo a la hora de descartar cosas: confío en que aquel recorte periodístico que guardé en su momento, recupere su valor testimonial con el paso del tiempo. O que esa vieja radio portátil quizás me acompañe en alguna caminata nostálgica en sintonía AM.
Luego se acumulan, como siempre, facturas, recibos, boletos de colectivo, credenciales, tarjetas de crédito vencidas y que uno procede a cortar prolijamente con una tijera, carnets de clubes a los que uno ha dejado de pertenecer, fotos de ex novias que uno no desea volver a ver ni siquiera en fotos, máquinas de afeitar, encendedores, calcomanías, almanaques de hace 20 años (esos pequeños que todavía obsequian en algunos comercios), CD's que hemos decidido no volver a escuchar aunque nos amenacen a punta de pistola. Créanme, es como abrir la Caja de Pandora, uno nunca sabe con qué se va a encontrar en aquel cajón olvidado, ése del fondo, el "juntaporquerías" que uno se resiste a limpiar hasta que su capacidad se ve colmada. Es un "no-lugar", como la papelera de reciclaje de Windows, donde va a parar todo los objetos que por un brote de comprador compulsivo aparecieron en nuestras manos. 


Pero, por otro lado, la "cultura del descarte" no es siempre provechosa. Más allá de lo que mencioné en los párrafos anteriores, usar y tirar algo que se supone de escaso valor, es parte de una sociedad que ha hecho extensivo ese proceder con los objetos, hacia las personas. Vale decir: "te necesito, te uso para mi conveniencia, y después ni me acuerdo de vos". Cuando hay afectos y sentimientos de por medio, es mucho más distinto que sacar la bolsa de residuos a la vereda. Punto final. 

Viernes otra vez...

Ya lo sé, digamos que no estuve muy creativo con el título de este post. Pero qué se le va a hacer, soy como un péndulo: sobrevienen momentos de súbita inspiración y otros de letargo mental. Este fin de semana pienso quedarme en casa, escuchando música y viendo películas, pero como suele suceder, siempre aparece un "Plan B" que puede cambiar el curso de los acontecimientos. Me gusta estar tranquilo, como a todo el mundo, que no me jodan, que respeten mi espacio y mi derecho a expresarme. De hecho, uno de los motivos (entre tantos) por los cuales este blog existe, fue esa necesidad de expresarme. Estoy harto de ver por TV asesinatos, saqueos, secuestros, golpes bajos, miserias humanas explotadas en formato "Prime Time". Basta, paren un poco! Si la Bolsa se "derrumba", me importa un carajo, si el dólar sube, lo mismo da. Si, como todo el mundo supone, se da el caso de que las AFJP dejan de existir, que en paz descansen. Hay muchas cosas verdaderamente importantes que dejaron de existir en este país y nunca nadie se preocupó por ello. Entonces, por qué me voy a preocupar por la suerte de un engendro creado por Menem y Cavallo en plena euforia de "los dorados noventa"? Si este Gobierno roba, no será ni el primero ni el último que lo haga (obviamente esto no resulta un justificativo para lo que sucede hoy). Pongamos las cosas en su lugar, porque si empezamos a revisar el archivo y a destapar las ollas de todo lo ocurrido durante estos 25 años de democracia, habrá varias sorpresas para más de uno.

20 de octubre de 2008

Crónica de un fin de semana zen (o quizás no tanto)


Luego de un largo tiempo sin frecuentar ese sitio, fui al Bar de La Porteña el sábado pasado, que a mi criterio es el mejor de Lobos. La música, excelente, la barra, muy bien provista, la atención, aceptable. Para beber opté por algo tranquilo, una Corona con limón, cerveza que para quien aún no la ha probado se la recomiendo enfáticamente, porque tiene un blend y un sabor exquisito como sólo en México saben hacerlo (no te ofendas, Quilmes, también guardo un grato recuerdo tuyo). Así las cosas, en compañía de amigos y de bellas señoritas hiperkinéticas, fue transcurriendo la noche, que coincidió con el cambio de huso horario y nos entretuvimos unos minutos discutiendo acerca de la conveniencia de tal medida. Además, a esa altura, nadie sabía a ciencia cierta si había que adelantar o atrasar el reloj. Finalmente con algo de sentido común, de mala gana aceptamos ajustar nuestra hora a los caprichos de CFK. Una linda noche, sin excesos, rodeado de gente a la cual uno aprecia por distintos motivos, y también una excusa para saludar a muchos amigos a quienes no veo durante la semana y sé que me los encuentro tarde o temprano en el citado reducto. La noche siguió "de rotation", dando vueltas por el Centro y haciendo filosofía barata, para luego desembarcar en La Porteña (el boliche), discoteca que hacía años que no pisaba y que me hizo sentir el sudor frío de la nostalgia. Las cosas han cambiado, y ya hemos desarrollado esta cuestión en sucesivos textos de este blog, pero a pesar de ello siempre sigue siendo un sitio familiar. Algo queda de "La Porteña" que yo supe conocer y disfrutar siendo adolescente. Hubo un recambio generacional que se tradujo en un lógico cambio de usos y costumbres, tanto en la forma de vestir como en las bebidas que se expenden en la barra. Pero no me puedo quejar, la pasé realmente bien más allá de los intentos fallidos con señoritas apetecibles que traté de seducir. Me divierte la situación, el ser rechazado con un simple mohín y que luego ese efímero objeto de deseo desaparezca entre el humo y las luces estroboscópicas.
El domingo la pasé genial, pese a que no pude ducharme del modo que yo quería por la ausencia total de agua caliente de las canillas, pero esta vez traté de no dejarme ganar por la indignación y acepté que era simplemente un mal comienzo, no iba a dejar que una boludez semejante me tenga de mal humor por el resto del día.
Ignoré sistemáticamente el partido Boca- River, si bien el domingo a la noche me interesé por ver el compacto del partido con las mejores jugadas y el gol que le dio el triunfo al equipo de mis amores (ups! frase cursi!).
Fui al parque con mis amigos y encontré tranquilidad, paz, espacio para conversar de los acontecimientos de la noche anterior y de otros vinculados a ella, para hacer filosofía barata y reflexionar sobre el sentido de la vida como hago todos los domingos cuando el sol empieza a caer.
A veces, la vida parece más sencilla de lo que es, y no está mal aprovechar ese espejismo (nótese que dije espejismo, NO ESCAPISMO) hasta que llegue el lunes y la rueda vuelva a girar.
Estamos en contacto, amigos, y gracias por soportar los incovenientes que tiene este blog.
Un abrazo, y hasta el próximo post.

10 de octubre de 2008

hablando de bueyes perdidos.

"Mis ojos perciben otra vez imágenes retro", cantaba Gustavo Cerati en 1985, y lo volvió a hacer en las sucesivas giras del trío más importante del rock en español. No sé si retro o vintage son la misma cosa, pero ahora se tiende a utilizar la palabra "vintage" para designar a todo aquello que tiene cierto sesgo cool y que supo ser objeto de consumo masivo hace un par de décadas. También es una especie de requisito que el objeto en cuestión haya tenido un impacto cultural importante, lo cual obliga a emitir un juicio de valor subjetivo porque no es sencillo ponerse de acuerdo acerca la relevancia que tuvo un determinado objeto de consumo en los años '80, por ejemplo.

9 de octubre de 2008

Intentos fallidos y depresión en ciernes

Este será uno de mis últimos intentos de publicar un nuevo post en este blog, a menos que el Señor Blogger esté de buen ánimo y me permita verlos publicados al instante, como solía ocurrir hace no tanto tiempo. Escribo y los textos permanecen ahí, en la base de datos del blog, pero la gente no los puede leer y comentar. De qué me sirve entonces? De todas maneras, no pierdo las esperanzas de que esto se normalice. Hoy es lunes y me sorprendo a mí mismo encontrándome tranquilo para lo que suele ser el primer día de la semana. Tras un "weekend" para el olvido, tengo que concentrarme en la semana propiamente dicha, en la vorágine del día a día, mal que me pese.
Son días de recuperar viejos afectos, de hacer las paces, de cerrar heridas que parecían no cicatrizar nunca, de pensar el futuro. Días de presupuesto ajustado y de contar las monedas una por una, porque la maldita inflación carcome tus ahorros. Días de un post que quisiera ver publicado en un corto plazo porque este blog tiene tres años de presencia en la Red y no voy a tirar todo lo que hice por la borda, por culpa de cuestiones totalmente ajenas a mi voluntad.
Y otra vez, mientras redacto estas líneas, la pantalla de la TV me escupe imágenes de una mano misteriosa contando billetes verdes, de colas interminables en las casas de cambio para conseguir la codiciada divisa, de mercados bursátiles que se derrumban como castillos de arena, de un gobierno argentino totalmente inepto para reaccionar y dar un golpe de timón en un país donde todo está atado con alambre. Los que vivimos con lo justo, como quien esto escribe, no tenemos mucho de qué preocuparnos, y lo digo en este sentido: nuestro poder de decisión es totalmente nulo y no tenemos depósito alguno en el banco, de modo que si nos quieren sacar las pocas monedas que tenemos en los bolsillos tendrán que pegarnos un palo por la cabeza.

30 de septiembre de 2008

Ultimo post del mes, una hoja menos en el calendario

Ultimo post de septiembre. Fue un mes lindo, podría decirse emitiendo un juicio de valor bastante naif. No me quejo de los acontecimientos que van cayendo sobre mí como pedradas del destino, es lo que hay. 

Tenés días en lo que te sentís John Travolta con toda la pista de baile a tu disposición, y otros en los que todo se hace tan largo que parece una peregrinación a Luján. Muchas la gente le juega demasiadas fichas a una etapa particular del año, incluso sin razón aparente. Pero no lo veo mal, cada uno se aferra a lo que puede para seguir viviendo y creyendo en que algo va a cambiar. Yo solía hacerlo hace un tiempo, pero me embarga una sensación extraña al intentar fijarme límites temporales en este momento de mi vida. Trato de no indignarme por las atrocidades que veo a diario. A medida que envejezco voy tomando conciencia que formará parte de mi vida contemplar -y convivir- con ese paisaje absurdo. Intento rescatar lo bueno de las personas, enredarme en una conversación, esbozar una sonrisa de satisfacción luego de haber visto una buena película, maravillarme del talento ajeno para escribir un libro considerado que me estimule a ser mejor escritor. En fin, pequeñas semblanzas de la vida cotidiana.

26 de septiembre de 2008

Recordando a Sui Generis: una burbuja en el tiempo

Este blog está indisolublemente vinculado con la música, con los discos, con una forma de entender la vida que está basada en las texturas sonoras y en el placer que nos produce disfrutar de ellas. En mi caso, No sé si me considero un melómano, ni un coleccionista tipo Bobby Flores, simplemente encuentro satisfacción cuando escucho algo que en su momento marcó un quiebre, porque uno comprende todo lo que vino después fue replicando, más o menos, ese hito. Hace poco compré el compilado "Obras Cumbres", de Sui Generis, un infaltable en cualquier discoteca, aunque luego mi percepción fue más allá de la música y se centró en el contexto. Más de 40 años después, las canciones parecen bastante ingenuas y no han envejecido bien, sólo son aptas "para un fogón en la playa", como solemos decir. Ahora, si vos escuchás, por ejemplo, "Instituciones", o más concretamente ese disco en particular que es el último que Charly y Nito grabaron en los ´70, hay un salto de calidad notable respecto de los anteriores, que pese a todo no son malos artísticamente. 

Recuerdo cuando escuché por primera vez "Confesiones de invierno", una de las canciones más bellas del rock argentino, compuesta por un muchacho de 20 años que luego nos seguiría sorprendiendo, superándose en cada nuevo álbum: Charly García. Sui Generis fue algo único, dudo que alguna vez exista un dúo que se le aproxime, ni siquiera remotamente, al virtuosismo musical, al vuelo poético de Nito Mestre y Charly García. 

A veces me pregunto: ¿Cuántos chicos de 17 o 18 años escucharon alguna vez a Sui Generis, aunque sea por mera casualidad? Claro que no se trata de temas que pasen en el boliche, pero nunca viene mal que tener una visión de lo que pasó antes de que vos nacieras. Vos sos hijo de tu tiempo, pero antes ese lugar lo ocuparon otros, distintas generaciones dieron lo mejor de sí para ofrecernos su talento, su arte. Por suerte, Nito y Charly siguen vivos, aunque en situaciones totalmente diferentes. Pero siempre han sido compañeros de ruta, como en aquel regreso fugaz del año 2000: Nito se banca los excesos de Charly, y a su vez Charly tolera la voz eternamente aflautada de Nito porque sabe que su propio registro vocal está seriamente dañado a causa de los susodichos excesos. Pero siempre que volvés a"Confesiones de invierno", es el retorno a un sonido cálido y con un sesgo obsoleto quizas, pero que marcó una época, incluso para aquellos que vamos redescubriendo otras bandas que no fueron aceptadas masivamente ni lograron convertirse en un éxito comercial, cuando aún no era común hablar del "under", como contracultura o lo que fuere. Nos estamos viendo pronto. Punto final. 

23 de septiembre de 2008

Soy moderno, no fumo

Desde hace tiempo vengo advirtiendo una suerte de condena social hacia los fumadores que me resulta exagerada, cuando no reaccionaria. Estamos todos de acuerdo en que "el fumar es perjudicial para la salud" tal como reza en los paquetes de los cigarrillos. También podría decirse que fumar en una reunión convierte a quienes nos rodean en fumadores pasivos. Pero creo que la persona que fuma es plenamente consciente del daño que dicho hábito provoca y que no podemos confinarlo a fumar en plazas y parques. Por otra parte, rara vez alguien se toma el trabajo de hacer una distinción entre el fumador "social" y el fumador crónico, que consume cuatro atados por día y tiene su dentadura amarillenta por los efectos del humo. Seamos más tolerantes con los fumadores, y no creamos que toda la legislación antitabaco que proviene de Europa o de Estados Unidos es progresista o de avanzada. ¿Por qué EE. UU. no deroga o modifica la Segunda Enmienda de su Constitución que garantiza el derecho de cualquier persona a portar armas, en lugar de preocuparse por los fumadores?

21 de septiembre de 2008

Crónica de un fin de semana en...

Por esas cosas del azar, el sábado cambié mi rutina habitual (soy animal de costumbres) y posé mis alas sobre Twister, ese mamotreto, casi un monumento al mal gusto que se erige sobre la Av. Yrigoyen al fondo. Antes había en ese mismo lugar otro boliche que duró muy poco, se llamaba "La Loba". 
Retomando lo sucedido el sábado, debo decir que se trataba de un cumpleaños cuyo dueño desconozco, pero la modalidad de ingreso era la siguiente: dejabas una bebida (alcohólica, obviamente) en la entrada, y eso te concedía el derecho a entrar y a tener acceso a una barra libre. Como era fácil imaginar, en estos canjes o pseudotrueques uno simpre sale perjudicado: si llevaste un Cinzano o un vino de buena calidad, recibirás como contraprestación en la barra nada más que cerveza y algún otro cóctel (vale decir trago) preparado a las escondidas. 

Podría escribir largo y tendido sobre lo que vi anoche, debo decir que lo que más me asombró fue la cantidad de bellas señoritas totalmente borrachas e incapaces de tenerse en pie, dispuestas a tener una noche de sexo con el primer idiota que tuviera un auto (lamentablemente estoy excluido de ese grupo de idiotas, seguramente pertenezco a otro). 

El consumo de bebidas "blancas" (principalmente vodka de pésima calidad) ha crecido alrededor de un 300 % después de la crisis de 2002, y a sabiendas de esos datos las escenas que vi anoche no me extrañan, de otra manera deberían haberme provocado pánico. Se trata de la exacerbación de lo patético, de un culto incomprensible a la degradación humana, a la decadencia, a la ignorancia y a la tilinguería. Y aquí hago una salvedad: la noción de "buen gusto" es discutible y ha sido víctima de varios análisis de parte de personas con muchos más argumentos que yo, pero todos sabemos la diferencia entre lo que es una fiesta con gente más o menos conocida y que tenga onda, y lo que es un descontrol primaveral, el famoso "spring break" americano. En una próxima nota quizás me refiera más a esto último, aunque la idea principal ha quedado más o menos clara.

19 de septiembre de 2008

Volvió la era de la boludez


Con este humilde post retomo el contacto con ustedes, tras unos días en los cuales el blog funcionó a media máquina, como les he comentado. Hablando de bueyes perdidos, ayer conversaba con un amigo sobre lo efímero de las cosas, comenzando por nuestra propia existencia y siguiendo con los artículos de consumo, los usos y costumbres de una sociedad, las convenciones de una época, las modas, y la forma de entender la vida de cada uno se ha ido forjando.
Pero hay algo que permanece inalterable a lo fugaz, y es la estupidez. Pasan los años y los estúpidos siguen, se encarnan en el cuerpo de otras personas, y de algún modo se las ingenian para seguir subsistiendo.
La noticia malintencionada, tendenciosa, sensacionalista. Los golpes bajos de las películas del cine comercial americano. Las supuestas "avivadas" que repetimos a diario y que nos cuestan ser un país de cuarta, donde nadie en el mundo confia en nosotros (no sólo para invertir, sino en el plano individual). Ese es el precio que se paga por la estupidez que nos carcome a diario y que se va reinventando constantemente. Parece que ahora "descubrieron", por obra de la casualidad, que existen "tribus urbanas" (básicamente, niños bien que están al pedo y no estudian ni trabajan) y se regodean con eso. Por favor, señores! Tan bajo podemos caer?? Como dije antes, la prensa carroñera siempre existió, pero al menos no la veías todos los días en la pantalla de TV mientras comés milanesas al mediodía. Que me dejen de joder! (perdón por la indignación y el exabrupto)

17 de septiembre de 2008

Días bajo el sol

Hola, gente!!! No sé cuando se normalizará el blog (como les comentaba en el post anterior) para que los textos que escribo aparezcan publicados en la fecha que son redactados, pero mientras tanto yo sigo escribiendo, para despuntar el vicio.
Hoy el miércoles, y la mitad de semana tiene un sabor especial. En realidad, creo que cada día de la semana tiene una connotación particular, y conversando con amigos llegué a la conclusión de que no soy el único demente que sostiene esta afirmación. Los miércoles en general suelen ser días de transición, uno ya va pensando en el finde, y como nuestra vida no es más que una eterna espera hacia la nada, no me parece mal que uno haga ese razonamiento inconsciente.
Estamos a días del comienzo de la primavera en el hemisferio Sur, lo cual es un motivo para que los días comiencen a estirarse hasta el infinito, florezcan los helados, las remeras y los shorts. La primavera nunca me terminó de convencer del todo, porque se depositan demasiadas expectativas en tres meses en los cuales ya todo el mundo da el año por perdido y se prepara para ver qué va a hacer en el siguiente. Este año en particular se me pasó rapidísimo, y creo que no soy el único. Sin embargo, si analizamos minuciosamente todos los escándalos de corrupción, negociados, truchadas, accidentes fatales, desastres climáticos, y crisis financieras, veremos que este 75 % del 2008 fue suficiente para que ocurrieran toda clase de cataclismos. Digo esto sin ánimo de ser apocalíptico, porque obviamente hubo pequeñas cosas que nos han reconfortado en lo personal, y que son las que nos ayudan a vivir. Porque si vamos a esperar a que el Gobierno (éste o los anteriores) nos den motivos para ser felices y prosperar, seguiremos recreando el mito del eterno retorno.
PD= Hoy es un buen día para escuchar cualquier disco de Billy Joel con un cigarrillo Kool y un vaso de Cinzano con soda y limón

16 de septiembre de 2008

DE VEZ EN CUANDO LA VIDA

El título de esta nota, alude obviamente a la bellísima canción de Serrat. Y hay mucho de azar y de casualidad en los hechos que se van dando en nuestra vida. De lo contrario, sería un camino lineal del nacimiento hasta la muerte. Pienso que cuando algo da un giro imprevisto, una "vuelta de tuerca" por motivos ajenos a nuestra voluntad, ello se produce porque no podemos predecir las acciones del resto de la sociedad hacia nuestra persona. Es cierto aquello de que "uno cosecha lo que siembra", pero sobran ejemplos de gente que no sembró absolutamente nada y se encontró en una situación de prosperidad, por los motivos más insólitos. El filósofo francés Jacques Monod indagó sobre esto y escribió un ensayo notable, "El azar y la necesidad". No comentaré el contenido del libro por si alguien está interesado en googlearlo o en conseguir el ejemplar. Otro libro de cabecera, más conocido que el anterior, es "Del sentimiento trágico de la vida", de Miguel de Unamuno. Ambos autores abordan, a su modo, el misterio que es vivir. 

Las personas hedonistas, que buscar el placer en lo cotidiano o en viajes exóticos, no son necesariamente vulgares o haraganas, simplemente entendieron de un modo que puede resultar discutible, que el tiempo es ahora, y que si tenés la guita para viajar no hay razones para dejar de hacerlo. Yo no soy esa clase de sujeto, quizás porque mis aspiraciones son más modestas y encuentro placer en otro tipo de actividades. En fin, tiene razón la revista Noticias con su célebre slogan: "Entender cambia la vida". Punto final. 

15 de septiembre de 2008

LOST IN THE SUPERMARKET


Ayer visité uno de esos hipermercados que brotan como hongos en el Conurbano, con el propósito de aprovechar los descuentos que éstos ofrecen en determinados comestibles, y de paso, boludear un rato en el sector de Electrónica, donde uno no deja de maravillarse con los televisores LCD. Debo confesar que la comparación con mi modesto aparato de 14 pulgadas que tengo en mi cuarto me exime de cualquier comentario.
La cuestión es que, si se trata de una salida en grupo (familia, amigos, o lo que sea) uno se pierde fácilmente del resto en esos monstruos modernos. Supongamos que vas para el sector de librería, y otro de tus amigos está en la góndola de vinos, 100 metros al fondo de donde estás vos. Quizá sea porque me distraigo fácilmente cuando estoy viendo algo que me interesa, pero ubicarse dentro del súper no resulta sencillo. Cuando finalmente decidís que compraste lo que querías y buscás al resto de la tropa para salir del local, perdés entre 15 y 20 minutos deambulando por los pasillos. La solución: enviar un mensaje de texto. Por estúpido que suene, le mandás un mensaje a tu amigo/a preguntándole dónde cuernos está y de esa forma se evita ese inútil peregrinar por las góndolas. También hay que ser mesurado para resistir la tentación de los híper, porque siempre terminás comprando boludeces que en realidad no necesitás, o que -en todo caso- no son de urgencia. Por eso, la solución para los compradores compulsivos es ir con la plata justa, o bien con un pequeño excedente. Me gusta ir a lugares como el Coto de Temperley o de Ezeiza, hay mucha variedad y todo lo que sea ropa se consigue a buen precio. Y tomarse un café mientras descansas un toque luego de haber gastado suelas en la nave central, es accesible todavía. Pero con los crecientes aumentos de combustibles y peajes, ya no se puede viajar casi a ningún lugar alejado de Lobos con la frecuencia que lo hacía antes. Punto final. 

13 de septiembre de 2008

De nuevo en contacto

Hola, amigos, cómo están pasando este fin de semana? Seguramente cada uno en lo suyo, algunos trabajando, otros disfrutando del ocio, y habrá aquellos que podrán gozar de los encantos de alguna dama. En fin, hoy es sábado y la noche de Lobos, a pesar de que tiene sus altibajos, sigue siendo una de las más lindas de la zona. No tanto por la variedad de locales nocturnos, sino por ese encontrarse con amigos, disfrutar de un poco de buena música, contemplar los contornos y las formas de la anatomía femenina, enredarse en esas discusiones de café que son tan inútiles como divertidas.
Es muy probable que todo esto uno lo pueda encontrar en cualquier ciudad del planeta, pero Lobos es mi lugar, aunque más de una vez reniegue de muchas cosas que no puedo concebir ni entender. Precisamente, esa indignación está motivada porque creo que Lobos tiene potencial y está para dar mucho más de lo que en este momento ofrece, tanto a visitantes como a locales. A veces, es simplemente una cuestión de actitud. De ser una ciudad "amable". Vale decir, de tratarnos bien entre nosotros, porque eso te eleva por encima de la mala onda y te hace sentir que el lugar donde estás viviendo no es un agujero con cinco cuadras de centro sino un lugar onda "Cheers". Where everybody knows your name.

12 de septiembre de 2008

Hoy es viernes!!!!!!!!!!!!

Hola, gente, retomo el contacto con quien guste leer. Hoy es viernes, y hasta el más miserable de los mortales guarda una mínima expectativa por el fin de semana. No por éste en particular, sino por cualquiera. "Necesito distensión", cantaba Gustavo Cerati, y es cierto. Todos necesitamos distensión. Relajarnos. Parar la pelota para recapitular y hacer todo aquello que nos quedó pendiente en el resto de los 6 días. Proponernos mirar la vida con otros lentes, dedicar más tiempo y lo que realmente nos da satisfacción hacer. Aquel que no tome alcohol, la encontrará a su manera, y el resto de la humanidad encontrará refugio en una cerveza, un cigarrillo o en un asado entre amigos que surgió de un momento a otro. A mí me gustan los viernes, son una suerte de preludio de algo que quizás nunca se concreta, pero cuya posibilidad existe. Me gusta andar feliz por la calle, agudizar mis sentidos, deternerme en cosas simples y a menudo olvidadas, encontrarme con un viejo amigo o con un simple conocido, hablar sobre la vida, sobre nuestras vidas, y darme cuenta, al fin y al cabo, de que estamos todos en el mismo barco y que debemos aprovechar el viaje al máximo antes de que la nave entre a naufragar.

9 de septiembre de 2008

Crónica del domingo de Mahalia Jackson

Fue un domingo 7 de septiembre feliz. En la era del MP3 y del desprecio sistemático y malicioso que se hace de lo analógico, me sigue provocando placer encontrarme con compacts originales que han sido fabricados como corresponde, y no con la impresentable calidad promedio de los CD's industria argentina. Recomiendo el "Greatest Hits" de Mahalia Jackson, cantante de gospel que ha sido considerada la mejor en su género y se ha hecho acreedora a numerosos Grammys. A pesar de ser un disco importado, su valor no supera el de un CD nacional, quizá porque está descatalogado o por esa lógica perversa del mercado. Bueno, lo concreto es que aproveché la oportunidad y me compré un muy buen CD, que (de yapa) me permitió incursionar en un género del cual no tenía el menor conocimiento como es el gospel. Otro clásico que recomiendo (ya yendo a otras vertientes musicales) es "Storm Front" de Billy Joel (1989), que es, a mi criterio, el último gran disco de Billy Joel antes de que se dedicara a hacer giras y disfrutar de sus millones. Qué se yo, uno encuentra motivos para ser feliz y disfrutar en estos pequeños hallazgos cotidianos, y no me parece mal que así sea. El que tenga afición por la lectura, seguramente encontrará un oasis en una librería como El Ateneo o cualquiera de similares dimensiones, ¿o no?

8 de septiembre de 2008

Buenos Aires, 1998


Los únicos motivos por los cuales me gustaría vivir en Buenos Aires es por la oferta cultural que tiene, y esto implica no sólo el acceso a espectáculos y charlas gratuitas sino también que si te querés comprar un disco o un libro que no es necesariamente un best-seller, sabés que en alguna "cueva" lo vas a conseguir (o quizás por Mercado Libre).
Por supuesto, y yendo a cuestiones más acuciantes, otro motivo que me haría cambiar mi lugar de residencia es una oferta laboral concreta (o que al menos parezca serlo). Vivir en Buenos Aires es caro comparado con Lobos, y lo sé por los amigos que viven allí y que deben pagar un ABL súper inflado por el Sr. Macri , un alquiler que se hace cada vez más cuesta arriba y unas expensas que van a parar a las arcas de los administradores de edificios, que no hacen nada más que poner un portero inútil y que no es capaz de resolver ni el más mínimo problema inherente a tu departamento. Lo único que es más barato que acá son las tarifas eléctricas.


Cuando yo viví en Buenos Aires, era una ciudad distinta. Hoy me lamento de no haber ido a visitar museos y sitios históricos emblemáticos, pero era muy joven y prefería boludear en Callao y Santa Fe antes que descubrir la exhuberancia del Jardín Botánico o del MALBA. Trato de no arrepentirme de esas cosas, porque a pesar de todo no puedo negar que la pasé muy bien y que completé mis estudios de Periodismo obteniendo el título habilitante a los 20 años de edad.
En aquellos tiempos (fines de los noventa) ya se notaba que la desocupación golpeaba fuerte, los pendejos drogados e intoxicados por el pegamento te pedían monedas igual que lo hacen hoy, con la diferencia de que no andaban con un 38 en la cintura dispuestos a matarte si no les dabas un cobre. Muchos vivíamos en una nube de pedos, al compás del "uno a uno" y del furor de lo importado, una linda jodita que duró diez años pero que nos costó carísimo, tan caro que las consecuencias del dúo dinámico Menem-Cavallo las estamos pagando hoy.

5 de septiembre de 2008

Trenes y efedrina: volvemos a 1994!

Quizás si Carla Bruni no hubiera sido una top model internacional y actual Primera Dama de Francia, sus incursiones en la música habrían transcurrido sin pena ni gloria, pero lo cierto es que con esos antecedentes, sus discos despiertan una gran expectativa. No puedo decir nada sobre el contenido de las letras dado que no tengo la menor idea de francés, y la señora Bruni canta casi exclusivamente en ese idioma. Pero por lo que he escuchado hasta el momento, tiene un estilo muy particular que no le sienta nada mal. Los arreglos de los temas son interesantes, sin estridencias ni gastos de producción estrafalarios, digamos que se pretende dar un sesgo intimista en cada placa. Cuando escuche los tracks con más detenimiento haré más comentarios al respecto.
Mientras a muchos la edición del CD y DVD de los shows de Soda Stereo les pareció una canallada por la voracidad comercial de Cerati y los suyos, yo no me escandalizo tanto. Era previsible que algo así sucedería, y registrar un show en un disco es una práctica tan natural para dar por concluido un contrato con una discográfica que uno ya no se sorprende.
"Efedrina" volvió a ser la palabra de moda: la última vez que la escuché hasta el hartazgo fue en 1994, cuando el nunca bien ponderado Diego Maradona consumió esa sustancia que lo dejó afuera del Mundial, se acuerdan?
Vandalismo en los trenes de la Línea Sarmiento: ¿es noticia nueva? ¿Los canales de TV y los medios gráficos se rasgan las vestiduras por algo que en rigor de verdad viene sucediendo sistemáticamente desde hace años? Si bien es cierto que destrozos como los de ayer no se producen todos los días, esa ilusa compulsión marxista por la destrucción como fin para alcanzar un poder que en las urnas son incapaces de obtener sigue existiendo.

2 de septiembre de 2008

Despertando del letargo

Primer post de septiembre. Haciendo números, he descubierto que -contando el presente post- he llegado al mismo número de artículos que en todo 2007. Nobleza obliga, 2006 fue el año más productivo en cuando a cantidad de textos, pero otro hecho gratificante es que he superado la marca de aquel 2005 inicial (hay que hacer la salvedad de que en ese último caso comencé a escribir en junio).
Hay temas sobre los que me resulta particularmente fácil y placentero escribir, es decir, me siento cómodo haciéndolo, tales como música, libros, o bien alguna reflexión que surge de lo cotidiano. En cambio, hay otros asuntos que ameritan un abordaje más arduo, y creo que uno también debe reconocer sus limitaciones.
Lobos es una ciudad de contrastes, de ambivalencias, de dualidades permanentes. Se me haría difícil describir la idiosincrasia lobense para quien no es que aquí. Ultimamente me he "reconciliado" un poco con Lobos, he tratado de tener una mirada más benévola sobre determinadas cosas, porque considero que no puedo renegar sistemáticamente del lugar donde he pasado toda mi vida. No sólo no es bueno; tampoco sería justo, porque en esta ciudad me he hecho un lugar, que me ha costado bastante por cierto, y ahora que lo tengo no estoy dispuesto a cedérselo a otro alegremente. No me interesa ser una persona popular ni un referente social, simplemente pienso que es bueno saber que aquello que uno hace llega a alguien y produce un efecto, es decir, que tantas palabras tipeadas en la compu no han sido en vano.

A la vuelta de la esquina

  Mitad de semana en la ciudad. No sé qué les pasará a ustedes, pero yo ya no me preocupo tanto como antes respecto a situaciones que aparen...