17 de mayo de 2008

Cosas que ya no hago

Ya no me interesan las mismas películas que antes. Cuanto más difusión tenga, menos conseguirá despertar mi interés. Esto incluye las películas de personajes animados concebidas para adultos, o mejor dicho adultos que no quieren crecer, al estilo de "Buscando a Nemo" y todas las de Disney que siguen esa línea. Si es una secuela (a saber, parte 2 o parte 3, con la única excepción de El Padrino) huyo rápidamente de la pantalla para no contaminar mis retinas con un despilfarro de efectos especiales y fuegos de artificio con atisbos de novedad.
Ya no creo que ningún "regreso" de bandas míticas del rock nacional o internacional (esto incluye a Soda Stereo, Genesis, The Police, y no mencioné antes a los Stones por una cuestión de buen gusto). Esto no implica que los shows derivados de estas giras no sean buenos, sino que simplemente no es sincero, no es genuino, y hasta bordea lo decadente, como en el caso de los Sex Pistols.
Ya no me esfuerzo en escuchar canciones de 15 minutos de bandas de rock sinfónico o progresivo. Pero tampoco me satisface la furia del punk envasada en dos minutos de ruido por canción.
Ya no compro más el diario, muy a mi pesar y contra todos mis principios, porque no estoy dispuesto tirar un promedio de 3 pesos por día para leer lo que la TV me repitió veinte veces el día anterior. Obvimente, la lectura de un diario o de cualquier material informativo impreso no se compara con la TV, pero es lo que hay. No puedo gastar. Prefiero comprar NOTICIAS (la revista) una vez por semana.
Ya no busco más novedades, creo que todo está inventado, que el mundo está lleno de refritos y de cosas que ya fueron hechas y que se vuelven a lanzar con un envoltorio nuevo. Internet, supuestamente la última gran revolución, quizás no sea más que eso. Es cierto que nos cambió la vida, pero dudo si fue una invención relativamente nueva o si en verdad ya existía pero no estaban dadas las condiciones para lanzarla domésticamente.
Eso es todo por hoy. Me fui. Que tengan un buen fin de semana.

Dame aunque sea una mísera señal!

  Martes por la noche en la ciudad. La verdad es que no estaba del todo convencido acerca de escribir algo hoy. Pero si voy a esperar a deja...