Lo cierto es que hay toda una generación de argentinos que nunca vio a la Selección llegar a esta instancia. Muchos no habían nacido en 1990, o eran demasiado pequeños como para analizar la dimensión de ese logro deportivo. Leo Messi es el conductor, el líder natural, que puede tener un mal día, pero que siempre mete alguna asistencia para que otro compañero clave la pelota en la red. Messi no es Maradona, basta de hacer comparaciones que no conducen a nada. Lo que sí se puede afirmar es que se trata del jugador argentino más talentoso de los últimos 30 años.
Renegué una y otra vez contra este equipo, hasta que vi el partido de hoy. Por primera vez, daba gusto ver jugar a Argentina. Y si nos toca jugar con Alemania, o con Brasil, no somos menos que nadie. El equipo tiene que salir a la cancha sin importar el rival, imponiendo su juego. Como lo hizo hizo hoy. El "Fideo" Angel Di María se retiró lesionado, y probablemente no pueda estar para el partido del miércoles ante Holanda. Y ojo que Holanda no es ningún cuco: no pudo doblegar a Costa Rica durante todo el partido y recién pudo imponerse en los penales. No nos conformemos con lo que conseguimos. Hay que salir a ganar. Vamos por todo. Punto final.
