18 de febrero de 2020

Caminando la calle en medio de un verano "otoñal"

Estamos transitando un martes agradable en la ciudad, ya que el calor nos dio un respiro y esta mañana era un placer desandar las mismas calles de todos los días con una brisa fresca y el cielo límpido de nubes. Esto puede cambiar en lo sucesivo, por eso hay que disfrutar cada jornada según lo que ella nos pueda ofrecer. Y una buena manera de hacerlo, es discutiendo menos, sobre todo con personas que no entienden razones y que constituyen una pérdida de tiempo. No dejemos que nada ni nadie nos arruine el día, salvo que sea algo realmente grave que justifique nuestra preocupación. Pensemos que el verano se está yendo, y aunque no te hayas ido de vacaciones, se sabe que el movimiento fuerte comienza en marzo, junto con el inicio de clases. Hay dos feriados de carnaval este mes, que para mí no tienen razón de ser, pero bueno, ya hace años que están en el calendario hasta que alguien decida removerlos. En otras notas anteriores ya he hablado de los feriados puente, por ejemplo, que existen con la pretensión de fomentar el turismo, pero carecen de sentido como conmemoración de hechos históricos. 

Cuando entremos en el otoño, ya será tiempo de ir buscando la ropa de abrigo que dejamos olvidada en alguna caja de cartón, y es probable que comprobemos con bronca que ya nos queda chica, pues nuestra fisonomía de fue haciendo cada vez más voluminosa, o dicho de otra manera, hemos engordado demasiado. Yo lo que trato es de mantener mi peso estable, si puedo bajar algunos kilos mucho mejor, pero por lo menos no dejar que la aguja de la balanza se siga disparando. Mucha gente me aconseja hacer más actividad física, pero lo cierto es que parece no ser suficiente que uso la bici a diario o bien salgo caminando para ir a un negocio o a hacer un trámite. Antes, que no vivía tan cerca del Centro, me veía obligado a hacer trayectos más largos. En fin, es lo que hay. 

Después de muchas idas y vueltas, hoy el Municipio confirmó que este año se realizarán nuevamente las Olimpíadas del Salado. Mucho se especuló con la falta de fondos para solventar este evento y con la dificultad para conseguir un subsidio de la Provincia. Seguramente, cuando hagan el anuncio oficial en conferencia de prensa, las autoridades brindarán precisiones al respecto. Me parece sensato que haya una continuidad, porque aunque el costo económico exceda la capacidad del Municipio, es uno de los grandes atractivos que Lobos no debe perder, por la cantidad de distritos participantes que convoca. Espero que la organización sepa prever el fracaso de años anteriores en materia de las ceremonias de apertura y cierre, y que sea una verdadera fiesta popular. Punto final. 



Las preguntas obvias también merecen ser respondidas

Con el paso del tiempo, vamos cambiando. Eso no es novedad, lo novedoso es cómo interpretamos ese proceso. El destino nos lleva a enfrentarn...