14 de octubre de 2018

Crónica de domingo por la madrugada

Madrugada de domingo en Lobos. Me desvelé, hacía tiempo que no me sucedía, de manera que me preparé un café y me dispongo a pasar el resto de la noche leyendo o adelantando el trabajo pendiente del día anterior. El sábado fue agobiante y caluroso, pero pude realizar todo el laburo de acuerdo con lo previsto. De hecho, no me pesa estar despierto ahora, porque dormirse temprano un fin de semana termina siendo un tedio, por más que uno no tenga planeado salir de su casa. Y a esta hora, son casi las 4 AM, no da para desandar las calles semidesiertas, prefiero quedarme en mi habitación hasta que me deje vencer por el sueño. 

 A veces, cuando estás haciendo una entrevista por un tema determinado, aparecen otros, propios de una charla cualquiera, que dan para hacer una nota aparte. Ayer me pasó algo parecido, hice una nota por la Avenida de las Artes, y me quedó bastante material que lo reservo para un próximo artículo. Como he mencionado alguna vez, el comportamiento del lector es bastante impredecible respecto al impacto o repercusión que puede tener una nota publicada. En muchas ocasiones creés que va a ser un golazo lo que escribiste y  finalmente obtiene pocas visitas o clics. Y en otros casos, cuando no te tenías mucha fe, resulta que se convirtió en lo más leído del día. Por eso, más allá de buscar darle forma a un texto para que sea ameno, no me planteo más hacerlo "best seller". Todo lo que sea exposiciones de arte, fotografía, eventos literarios, no cosecha demasiado interés para un diario digital. Sin embargo, es mi deber publicarlo y darle difusión, porque además me interesa que se conozca la actividad que tiene Lobos, su vasta reserva cultural. Alguien podrá decir que "la cultura no vende", y quizás sea cierto, pero un medio de comunicación debe informar sobre todo el acontecer local, no sólo accidentes o noticias policiales. Por supuesto, cada editor hace lo que quiere, solamente estoy dando mi modesto punto de vista. Si tenemos fines de semana ajetreados, es porque en Lobos todavía hay gente con ganas de hacer cosas, de exponer su arte, de presentar libros de su autoría, lo de emprender campañas solidarias. Y en realidad, hay un público lector para todo tipo de material, aunque algunas noticias rankeen más que otras. Me suele suceder, mientras estoy redactando algo, que me pregunto "a quién le puede importar esto", porque a veces no comprendo como pierdo 15 minutos de audio en una conferencia de prensa que no vale nada. Pero es lo que hay. Parte de la capacidad que uno puede tener, está en rescatar lo esencial de la noticia en medio del palabrerío de políticos y funcionarios. Punto final. 

Última nota de 2024: Para el baúl de los recuerdos

  Esta es la última nota que escribiré durante lo que resta de 2024, así que no abusaré de vuestra paciencia en la lectura.   En primer lu...