2 de octubre de 2018

Dos últimos meses de 2018

Iniciamos la recta final, los dos últimos meses del año. Pienso que este 2018 no será recordado de la mejor manera, excepto para aquellas personas que tuvieron alguna gratificación personal, como haber encontrado una relación de pareja o haber tenido un hijo, que son dos grandes satisfacciones que te puede deparar la vida. Sé que suena a hartazgo hablar de todo lo que nos está pasando, pero sería necio ocultarlo, creo que es hora de que se debata, se hable y se discuta para que "alguien" nos escuche como ciudadanos. Por supuesto, tanto yo como muchas personas que debemos laburar todo los días no nos podemos dejar ganar por el desánimo, porque la rueda sigue girando. Forzosamente, debemos adaptarnos a un escenario económico y social que nadie había imaginado. Y claro está que no es agradable para nadie hacerlo, porque tenés que recortar gastos, buscarle la vuelta, renegociar presupuestos...todo ello hace que tu calidad de vida no sea la misma de 10 o 15 años atrás. Con el kirchnerismo en estado de coma, se avecina un reacomodamiento en el ajedrez de la política. Es probable que en 2019 nos encontremos con dirigentes "reciclados", que ocuparon cargos en su momento, dejaron un desastre, y ahora vuelven como líderes mesiánicos. Esto me hace acordar a cuando De la Rúa convocó a Cavallo para el Ministerio de Economía. Como verán, todo puede pasar. 

Por mi parte, trato de cuidar mi salud y la de mis seres queridos, que es el principal capital para mantener un cuerpo sano y poder vivir de un modo pleno. A veces lo logro, otras no, pero si estás enfermo de lo que fuere, ello te limita y te sentís prisionero de tu cuerpo, además de verte obligado a comprar remedios que cada vez se alejan más de la modesta capacidad del bolsillo. Punto final. 

Dame aunque sea una mísera señal!

  Martes por la noche en la ciudad. La verdad es que no estaba del todo convencido acerca de escribir algo hoy. Pero si voy a esperar a deja...