Sé que no es fácil, a todos nos cuesta lograrlo, pero para mirar la vida distinto es necesario romper con el pasado. Ese pasado que nos condiciona y muchas veces nos hace sufrir, porque se repite en nuestra mente como un mantra. Debemos comprender una cosa: los momentos tristes o traumáticos que pasamos no los podremos olvidar, no existe la "pastilla del olvido". Pero sí podemos hacer que esas experiencias pasadas nos afecten lo menos posible nuestra vida actual. No soy psicólogo ni psiquiatra, son tan sólo reflexiones que surgen de charlas que he tenido con amigos que han atravesado situaciones ingratas y aún sienten que cargan con esa cruz. Y este viernes, este extraño "feriado puente", me motivó a escribir estas líneas.
Nuestros padres nos educan diciéndonos: "que los errores te sirvan de experiencia". La realidad es que muchas veces volvemos a cometer esos errores, e incluso ni siquiera son tales, sino conductas voluntarias y conscientes que no podemos evitar. Yo no reniego de las personas que hacen terapia, me parece bárbaro la gente que va a una sesión con un psicólogo, pero antes de dar ese paso tenemos que empezar a analizarnos nosotros mismos, viendo qué cosas que nos están jodiendo la vida podemos cambiar. Digo esto como una forma de iniciar la terapia con una idea: hacia adónde queremos llegar. Punto final.
Blog de Lobos, ARG, desde hace 18 años en la Web.
21 de junio de 2013
"No me sueltes la mano", dijeron los senadores
Viernes por la tarde en la ciudad. Estoy tranquilo, pero también somnoliento, así que procuraré escribir lo que tengo en mente. Observo que ...
-
Mucho se ha dicho y escrito acerca de los cambios que ha traído aparejados el uso del teléfono celular en la vida cotidiana. Se trata de...
-
Miércoles 2, primer texto del nuevo año. Ayer tuve el impulso de escribir algo, pero luego me surgieron algunos compromisos y no lo pude con...
-
Buena parte del fin de semana, periodísticamente hablando, lo dediqué a cubrir este evento que se ha dado en llamar “Encontrarte en Carnava...