24 de septiembre de 2015

Mañana de jueves

Lo que a menudo se conoce como "operación de prensa", es en realidad información sensible sobre una personalidad de la política, que afecta su buen nombre y honor. Pero ello no quiere decir que la información sea falsa, sino que fue utilizada con un sentido oportunista para afectar al aludido en plena campaña. Por ejemplo, el lavado de dinero por el cual se lo acusa a Fernando Niembro es una denuncia de extrama gravedad, y no creo que sea información carente de sustento. Probablemente, mucha gente de los medios lo sabía, simplemente aprovecharon la oportunidad para manipular esos datos para atacar a ese pseudo-periodista que quería ser Diputado.

 Debemos sea cautos al reaccionar sobre todo lo que vemos o escuchamos en estos días. Por citar un caso, la desnutrición infantil es un flagelo aberrante, pero no me van a hacer creer que ese chico que apareció en la tapa de Clarín es el primer niño desnutrido del Chaco. Por supuesto que me indigné con la noticia, como la mayoría de la gente, pero luego reflexioné y me puse a pensar que estos tipos de los medios se cagan en los pobres o en quienes padecen una necesidad. Su único interés es usarlos para demostrar lo mal que está el Gobierno, o lo corrupto que es el sistema. Las operaciones de prensa están a la orden del día, tanto para el oficialismo como para la oposición. Nunca vi algo tan abyecto, con semejante bajeza y falta de escrúpulos como en este tramo preelectoral. He pasado por varias elecciones, pero esta es la primera vez que todo parece de cartón pintado, tan burdo, y lo único que nos queda es escuchar a los propios candidatos, que aceptaron debatir por TN el 4 de octubre. Por más asesores de imagen que tengan, una buena pregunta los puede pulverizar. Punto final.

Dame aunque sea una mísera señal!

  Martes por la noche en la ciudad. La verdad es que no estaba del todo convencido acerca de escribir algo hoy. Pero si voy a esperar a deja...