22 de junio de 2016

Agradable tarde de invierno

Ayer comenzó "oficialmente" el invierno, y como todos los años, vamos notando que los días se "acortan", que anochece a las cinco y media o seis de la tarde, algo que al principio nos desorienta porque miramos el reloj y no podemos creer que todavía queden tantas horas. Cae el sol y las calles van quedando desiertas, excepto para aquellos que deben continuar con su jornada laboral. Como dije una vez, ni el verano es tan caluroso como antaño ni el invierno es tan frío. Habrá que desempolvar del ropero los pulóveres, camperas, y la bolsa de agua caliente para no dormir con los pies congelados. Por lo general, con la llegada del frío proliferan las enfermedades, no sólo un resfrío o una gripe, y las farmacias obtienen su mayor rédito en esta época del año. Para la mayoría de nosotros, resulta increíble la rapidez con que trascurren los días, o mejor dicho, la percepción que tenemos. A veces, tengo que hacer memoria para recordar en qué año ocurrió un hecho determinado, en cambio hay personas que tienen la capacidad de retener fechas y datos sobre un acontecimiento en particular.

 En estos meses de bajas temperaturas, el consumo de energía eléctrica se ve incrementado, por eso entre tantas noticias que nos desalientan, una positiva es que por una medida cautelar, EDEN deberá retrotraer sus valores de las boletas a los que estaban vigentes antes del "tarifazo". Como era de esperar, desde la empresa "aconsejaron" pagar las boletas con el aumento, y hablaron de una hipotética refacturación. Sucede algo parecido a lo que ocurrió con Cablevisión. Desde la Secretaría de Comercio Interior fijaron unilateralmente un precio para el abono mensual, mientras la empresa seguía aumentando sus tarifas. Así, quienes pagaron el monto que según el Gobierno correspondía, vieron cómo Cablevisión los intimaban con un aviso de deuda, a pagar la totalidad del abono que la empresa había establecido. Ojalá que con la luz no suceda lo mismo, que el usuario no se vea afectado y que las cuentas sean claras. Lamentablemente, es preferible pagar con el tarifazo incluido antes de estar en condición de deudor, con la amenaza de que te corten el servicio. Habrá que esperar, entonces, a que llegue la próxima factura con los nuevos montos que excluyen el aumento. Mientras tanto, cada vez veo más gente que hace consultas en la Oficina de Defensa al Consumidor del Municipio, y la mayoría de los reclamos son precisamente por las tarifas eléctricas. Un detalle no menor, es que la facturación ahora es mensual, no bimestral, por lo cual hay que prestar atención a los vencimientos. 

La quita de subsidios debería haberse implementado en forma gradual, y aunque es un tema remanido y del cual se ha hablado demasiado, la conclusión a la que podemos arribar es que el Gobierno, con el nuevo cuadro tarifario que implementó, pagó un costo político innecesario para una gestión que recién comienza. En rigor de verdad, con la inflación alta y los alimentos esenciales en plena remarcación de precios, no se tuvo en cuenta la oportunidad, el momento adecuado para tomar una medida semejante. Fue demasiado lapidario el castigo para el bolsillo del ciudadano promedio. Podemos discutir si era necesario o no quitar los subsidios, por la carga que ello significaba al Estado. Pero las declaraciones posteriores de los funcionarios tampoco ayudaron a poner paños fríos y apaciguar los ánimos. Se dice que estamos pagando los platos rotos de una "fiesta" de 12 años, lo que puede ser cierto, pero no tenemos por qué ser nosotros quienes paguemos las consecuencias del despilfarro de otros. Que alguien, alguna vez, vaya preso con sentencia firme si se enriqueció con dinero mal habido. Punto final. 

Crónica de una sociedad en ataque de nervios

Comenzamos la semana. Ayer saltó la térmica y media casa permaneció a oscuras mientras intentaba escribir estas líneas. Así que tuve que int...