3 de febrero de 2018

Meses "muertos" y cómo seguir adelante con el laburo




No claudicar significa no darse por vencido, aún en la adversidad. Por supuesto que es fácil decirlo, pero se vuelve cuesta arriba cuando los hechos nos sobrepasan y nos ponen en un nivel de estrés tal, que no podemos pensar con claridad. 

En Lobos, la "malaria" que hay (léase recesión), afecta la actividad comercial notablemente, sobre todo en los meses de verano. Pero yo vivo de mis actuales y futuros anunciantes. Realmente no me importa cuánto cobran los demás por un aviso, yo tengo un tarifario que considero razonable, en función de muchas variables.  

Prefiero que me digan abiertamente que "no", de un modo educado, por ejemplo: "en este momento no puedo", o lo que sea, antes de que me hagan perder mi tiempo para ir 5 o 6 veces a un negocio a cambio de nada. Por otra parte, es la respuesta que uno merece, porque cuando vas a ofrecer tus servicios actuás de un modo educado y respetuoso. Podría agregar que no me molesta que me digan que no, porque cada uno es dueño de poner su publicidad donde lo desea y nadie está obligado a nada. 

Esta noche de sábado, hice un paréntesis entre mis actividades, y fui al Patio Vip de La Porteña, donde un querido amigo brindó un show en vivo. Muy buen ambiente, pensé que solamente frecuentarían ese lugar adolescentes o pendejos, pero no me sentí un dinosaurio porque había gente de mi edad. Voy a volver. 

Retomando, y yendo a temas más alentadores, hago mucha producción periodística. Esto significa, básicamente, generar tu propio material, hacer entrevistas, coordinar horarios, y una serie de cosas que son previas al producto final, que es aquello que aparece publicado y que ven los lectores. No voy a mencionar acá los "secretos" de mi laburo o mi modalidad de trabajar, porque es un esquema que ya tengo incorporado y que forma parte de haber conocido mucha gente (desde el más solidario al más despreciable), y de algún modo aprendí a lidiar con eso. Tengo un enorme respeto por los lectores, no cabe duda que sin las palabras de aliento y apoyo que recibo, todo sería más difícil. Y siempre tuve bien en claro dos cosas: Uno no puede caerle bien a todo el mundo, ni se puede conformar a todos. Porque si fuera así, por pretender quedar bien con todos y hacer demagogia, estás dejando que los demás decidan por vos. Punto final.

Las preguntas obvias también merecen ser respondidas

Con el paso del tiempo, vamos cambiando. Eso no es novedad, lo novedoso es cómo interpretamos ese proceso. El destino nos lleva a enfrentarn...