4 de noviembre de 2019

Luchá por aquello que te apasiona!!!




Muy pocas veces nos ponemos a reflexionar en lo que realmente es importante y vale la pena, como son los amigos, la familia, los afectos. Hay personas que se jactan de tener mucha cultura y billetes pero carecen de todo contacto personal. Almuerzan o cenan sin saber lo que están comiendo, mirando la pantalla de TV como si fueran zombies. Lo sustituyen con el uso del celular, el WhatsApp,  o cualquier "chiche" nuevo. Hasta las postales navideñas, con sus habituales mensajes cursis y sensiblería barata, se envían ahora por Internet.

Sin embargo, todo se mide según los deseos e intereses de cada uno. Por ejemplo: sin la Web, claro está, este blog no sería posible ni tendría la posibilidad de difundirlo. De manera que renegar de "la red de redes" a esta altura sería escupir para arriba. Pero creo que podemos hacer un uso racional de las nuevas tecnologías. Inclusive, más productivo. Aprender algo a partir de una noticia publicada en Internet no está nada mal. Hay muchos tutoriales en You Tube que muchas veces te sacan de un apuro. Y quizás no vendría mal no estar tan pendientes de Facebook,  ya que dejaríamos de vivir la fantasía de que tenemos centenares o miles de "amigos virtuales". No hace falta ser demasiado sagaz para razonar que sólo un puñado de ellos estarán con nosotros en situaciones límite.

2020 será un año duro, pero me consuela pensar que, al menos para quienes hacemos periodismo no tendremos que cubrir una interminable sucesión de actos políticos que son propios de las elecciones.  Realmente los meses de campaña política fueron muy desgastantes y en lo profesional te exigen al máximo.  En los meses previos al 27 de octubre, hubo de todo: anuncios, inauguraciones, acusaciones cruzadas, cortinas de humo, chicanas políticas, y golpes bajos. Es el juego de la política, tal como se entiende en la Argentina de hoy.

Simplemente espero que tengamos la capacidad suficiente para ser tolerantes, porque los medios de prensa suelen ser blanco fácil de las críticas y quienes nos dedicamos a esto debemos tener el temple necesario para seguir adelante a pesar de que más de una vez, uno quisiera reaccionar ante un acto que considera injusto.

Mientras tanto, insisto que debemos buscar refugio en aquellas cosas que nos hacen bien, que nos dan placer, porque no vinimos a este mundo sólo a trabajar y a pagar cuentas, sino a darnos la oportunidad de ser felices con lo mucho o poco que tengamos a nuestro alcance. De lo contrario, estamos condenados a vivir al mejor estilo "Tiempos Modernos", de la mecanización del hombre, el antológico filme de Chaplin.  Soy optimista respecto a lo que pueda hacer Alberto F. a partir del 10 de diciembre, pero no le voy a dar un cheque en blanco.
Considero oportuno meternos en el "bocho" algo muy simple, que mencioné en otro texto, con sesgo optimista: Todo tiempo pasado fue peor (contradiciendo el popular "Todo tiempo pasado fue mejor"). En todos los sentidos, sería arduo abundar en esto, pero particularmente en Ciencia y Tecnología. Dejemos de luchar contra la nostalgia, de sostener aquella imagen de "El Granero del Mundo" que creímos ser y quizás ni siquiera lo fuimos, porque fue la coyuntura de un determinado momento de la historia. 

Dejemos de lado todo amiguismo, más aún en tiempos de campaña. Si cada uno se dedicara a superarse en lugar de mirar la paja en el ojo ajeno, todo sería diferente, por más que el dólar esté por las nubes y los diputados se roben hasta la Casa Rosada. Punto final.

Última nota de 2024: Para el baúl de los recuerdos

  Esta es la última nota que escribiré durante lo que resta de 2024, así que no abusaré de vuestra paciencia en la lectura.   En primer lu...