25 de abril de 2018

El HCD: Crónica de una sesión agitada y difícil

La verdad es que trato de "decodificar" todo lo que vi y escuché ayer por la noche, en calidad de periodista, cuando concurrí a la escandalosa sesión del Concejo, y todavía no salgo de mi asombro. Nunca había presenciado algo semejante. Por supuesto que estamos viviendo un momento difícil, y que la presión por las facturas de luz y gas nos agobia. Además, es valioso que muchos vecinos hayan presenciado dicha sesión. Pero bajo ningún punto de vista se puede caer tan bajo de insultar, agraviar, a los concejales oficialistas, porque ellos nos representan a TODOS los lobenses, quienes los votaron y quienes no. Y están en todo su derecho de disentir con el proyecto presentado por la oposición. 

Si el objetivo de la masiva presencia de vecinos fue torcer la voluntad de los ediles de Cambiemos, no se logró el cometido, dado que el citado proyecto fue rechazado, en base a aspectos formales, y a otras consideraciones que luego se fueron exponiendo. Una de ellas, es que el HCD no tiene potestad para decidir sobre servicios públicos provinciales o nacionales. Lo cierto es que el concejal Zabalo se sinceró al afirmar que, aun cuando esos "aspectos formales" se hubieran corregido, difícilmente hubieran aprobado el proyecto. Si nos ponemos en la piel de los legisladores, que tenían detrás a un gran número de vecinos y militantes que los insultaban, no es la mejor manera de sesionar en paz, con un griterío constante. 

Hoy, los hechos dicen que Cambiemos tiene mayoría absoluta en el Concejo, y además -como hemos dicho- tiene quórum propio, lo cual quiere decir que no necesita del resto de los bloques para sesionar, y si lo desea puede abortar una sesión al no presentarse en la Sala. Que no nos guste esta realidad, es otra historia. Habría que pensarlo mejor al momento de votar, luego es demasiado tarde para lágrimas. 

No estoy defendiendo al oficialismo, lejos de mi ánimo está hacerlo, sólo digo que en esas condiciones se vuelve imposible llegar a un acuerdo, con una horda que empieza a putear y a gritar, y ahora parece que extrañamos a los K, cuando durante 12 años nos chuparon la sangre. Punto final. 

Dame aunque sea una mísera señal!

  Martes por la noche en la ciudad. La verdad es que no estaba del todo convencido acerca de escribir algo hoy. Pero si voy a esperar a deja...