30 de abril de 2017

Deportes y valores.

Ultimo día de abril. Intensa (y agotadora) actividad en el cierre de las Olimpíadas, pero de ningún modo me quejo, es lo que elegí hacer, la profesión a la cual dedico mi vida y que me genera ingresos. Podrán decirse muchas cosas respecto a este evento deportivo, si es un gasto o una inversión, si se escogieron los lugares adecuados, qué perfil de políticas deportivas tiene el Municipio de Lobos. Lo concreto es que se ha tomado la decisión de continuar con esto, y no deja de ser un acontecimiento de interés para cierto sector de la sociedad.

Es un error pensar que sólo con el deporte "se saca a los chicos de la calle". Los menores deben tener acceso a una contención integral, no el mero hecho de jugar al fútbol o a lo que fuere. Y los padres ausentes son los culpables de lo que está sucediendo y vemos todos los días por televisión. Personas que supuestamente decidieron tener un hijo y no asumen que no es una planta que crece sola, sino que necesita ser regada y cultivada todo el tiempo. Por lo menos, hasta que cumplan la mayoría de edad. Para eso existe la Patria Potestad, que es compartida. Y como dice Serrat en su célebre canción, nadie puede impedir que sufran, como nos pasó a nosotros siendo adolescentes. Hace falta educar, para que las nuevas generaciones sepan que el mundo no es el mismo de 30 años atrás, ese en que nos criamos nosotros. Hoy, necesitamos  darles temple, fortaleza para luchar ante la inequidad, el engaño, la miseria moral y la corrupción. Decime cómo le explicás a un chico que vive en un país donde Tinelli y los mafiosos de la AFA tienen más poder que el Presidente. Que hay ciudades sitiadas por los narcos. Cómo explicarle que va a tener que laburar de changas porque no hay trabajo y lo poco que puede haber de demanda, es en negro. Cómo explicarle que se va a jubilar con la mínima, si tiene la suerte de llegar a los 60/65 y no morir en el intento. Desde que tengo uso de razón vengo escuchando a los viejos decir que "la jueventud está perdida". Ellos alguna vez fueron jóvenes y no hicieron demasiado, y hoy se rasgan las vestiduras porque ven el resultado de lo que no pudieron hacer. Por supuesto que todos esfuerzo que se haga es loable, y ojalá que se siga trabajando en minoridad. Pero apelar a eufemismos, no es más que engañarnos nosotros mismos.

Basta de joder con palabras que quedan bien. Basta de hablar de "valores". Se terminó el "todos y todas", se terminó 678. Las instituciones del Estado no están para juntar  un montón de pibes jugando al fútbol y cagándose a patadas, sino para detectar el problema y solucionarlo. Es cierto que enseñarles un oficio es algo positivo, pero no basta, esta es la generación post-2001, que creció en la primavera kirchnerista y luego vio todo el derrumbe. A ver si algún día nos sacamos el rigor académico de encima y llamamos a las cosas por su nombre. Punto final.

Dame aunque sea una mísera señal!

  Martes por la noche en la ciudad. La verdad es que no estaba del todo convencido acerca de escribir algo hoy. Pero si voy a esperar a deja...