18 de junio de 2015

Bajar un cambio

Tranquilidad. Cae la noche y tanto mi mente como mi cuerpo piden tranquilidad. Por unos días,quisiera flotar en el agua, como si estuviera en el Mar Muerto. Necesito distensión, como cantaba Cerati. Voy a hacer valer mis pergaminos y mi trabajo a quien le guste y a quien no, mis 12 años tratando de dar lo mejor de mi profesión. Pero ahora sólo quiero descansar, pensar que mañana será otro día, y que la vida siempre da revancha. O mejor dicho, no quiero pensar, quiero escuchar la radio bajito (pero muuuy bajito), y dormirme plácidamente. Y tratar de recuperar el hábito por la lectura, que ha ido menguando. Se avecinan vientos de cambio para quien esto escribe. Y me siento capacitado para adaptarme. Punto final para el día de hoy.

Sólo una vuelta más...

  Primeros días de diciembre. Se nota que hay más movimiento en la calle, más afluencia de clientes en los comercios, y seguramente es un fa...